SORIA: CUANDO LOS DIABLOS ANDABAN POR SORIA...

CUANDO LOS DIABLOS ANDABAN POR SORIA
Hace muchos años los diablos dicen que pisaban por la ciudad de Soria, eran como cabras con sus cuernos retorcidos, las miradas eran como si echaran fuego, y los hombres con capas negras en la noche, trataban de esquivar sus encuentros, las gentes que no se creían esos hechos, trataban de no salir por las noches, para evitar esas miradas de fuego, con patas de chivo, y sus cuernos preparados para atacar a cualquier enemigo. Eran años donde la Inquisición te podía mandar a la hoguera, por eso muchos humanos, aunque viesen ese espectáculo tan sombrío, no comunicaban nada. Era mejor pasar de todo antes de que te hicieran un lavado de cerebro, del cual nadie sabía como podía salir, Los diablos salían de cerca del Rio Duero, a veces iban de dos en dos, y usaban las calles sin luces ni apenas vecinos, para atemorizar a sus habitantes, no usaban candiles ni faroles, solo sus ojos rojos desprendían luminosidad, con lo que atemorizaban a su convecinos, comentan que alguno llevaba su tridente, para imponer mucho más a cualquier valiente, ya que sus dientes eran agujas afiladas a fondo, Siempre el Río Duero era un brillo constante en la noche, y el miedo crecía a su alrededor, incluso personas que tenían armas de fuego o espadas, no querían salir por las noches para no enfrentarse con dichos diablos, ya que pensaban que les podía fallar el arma y terminar siendo víctima de esos seres endiablados, que seguro que terminarían con ellos, sacándoles el corazón o cualquier cosa del intestino. Si alguien llamaba por la noche en el portón o llamador, siempre se decía. Quien anda ahí, y el que fuera contestaba para que le abrieran, y si no era conocido le decían que volviera mañana por la mañana, que no eran horas de llamar a ninguna casa, y además estaba el padre acostado. Los diablos dejaron sus rastros de sangre, que algunas personas decían que eran animales muertos, Más eran tiempos de estar en casa antes de las diez, incluso a la metida del sol. G X Cantalapiedra.