NUESTRO QUERIDO ÁRBOL DE LA MÚSICA, EL ÁRBOL DE SORIA
El otro día pedía a alguien que enviase la foto del Árbol de la Música, nuestro querido árbol por antonomasia (1611-1987), que la maldita grafiosis nos arrebató. Ya no hace falta, porque la he conseguido. Creo que todos los sorianos que lo conocimos lo echamos de menos. No digo ya los que estamos fuera. Yo cuando vuelvo por la tierra y veo el lugar donde estuvo no puedo menos que sentir la nostalgia de su ausencia, máxime cuando un familiar cercano y muy querido formaba parte de esa Banda Municipal que nos deleitaba los domingos ofreciéndonos los conciertos desde el templete al que se accedía por una escalera de caracol metálica.
Por no decir cuando, en vísperas de San Juan, esperábamos impacientes "la nueva" que así era conocida la sanjuanera que componía cada año el maestro D. Francisco García Muñoz y a las que ponía letra D. Jesús Hernández de la Iglesia. Letra que todos aprendíamos ese domingo vísperas de fiestas. Sanjuaneras que forman parte de nuestro rico acervo cultural; imaginario colectivo de un pueblo que sí sabe cantar.
El otro día pedía a alguien que enviase la foto del Árbol de la Música, nuestro querido árbol por antonomasia (1611-1987), que la maldita grafiosis nos arrebató. Ya no hace falta, porque la he conseguido. Creo que todos los sorianos que lo conocimos lo echamos de menos. No digo ya los que estamos fuera. Yo cuando vuelvo por la tierra y veo el lugar donde estuvo no puedo menos que sentir la nostalgia de su ausencia, máxime cuando un familiar cercano y muy querido formaba parte de esa Banda Municipal que nos deleitaba los domingos ofreciéndonos los conciertos desde el templete al que se accedía por una escalera de caracol metálica.
Por no decir cuando, en vísperas de San Juan, esperábamos impacientes "la nueva" que así era conocida la sanjuanera que componía cada año el maestro D. Francisco García Muñoz y a las que ponía letra D. Jesús Hernández de la Iglesia. Letra que todos aprendíamos ese domingo vísperas de fiestas. Sanjuaneras que forman parte de nuestro rico acervo cultural; imaginario colectivo de un pueblo que sí sabe cantar.
