EL BURGO DE OSMA: SOMBRAS DE VIEJOS ENEBROS...

SOMBRAS DE VIEJOS ENEBROS
Cuando pisas los caminos
de la Ribera del Duero,
puedes ver alegres pinos
en cualquier mes de febrero.

Por caminos y laderas
se ven pinos altaneros,
y en las verdes primaveras
cantan grillos bullangueros.

Sombras de viejos enebros
marcados por grandes hielos,
caminos que son de pueblos
que a veces piden consuelos.

Sombras que van alargando
las tristezas del letrero,
el Duero pasa gritando
en este mes de febrero.

No sirven las armonías,
ni recitar romancero,
quieren borrar simpatías
de la gente con su Duero.

El Burgo mira tranquilo
al bonito río Ucero,
mientras al caudal perfilo
lo que piensa sobre el Duero.

Los enebros centenarios
esperan el aguacero,
secos, tristes, solitarios,
así les contempla el Duero.

Enebros que fueron gloria
por los caminos del viento,
hoy solo queda memoria
de aquel grande sufrimiento.

Enebros llenos de vida
que conocen bien los hielos,
en esta tierra querida
hoy no crecen en sus suelos.
G X Cantalapiedra.