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DEZA: Llegar y besar el santo...

Llegar y besar el santo

Como todos sabemos, España ha sido un país de tradición católica, bastante religioso, sobretodo hasta hace unos años. Pues bien, imaginad que una persona va de peregrinación a visitar al santo por el cual siente gran devoción, amor, veneración, fervor, y entusiasmo religiosos, una afición especial, y que después de pasar horas y horas de camino hasta llegar al santuario o templo en el que se encuentra el santo, hay una larga cola de otras personas que también han ido a visitar al mismo santo, con lo que tendrá que esperar otro par de horas hasta poder por fin ver, tocar y besar a su santo. Qué mala suerte, ¿verdad? Pues bien, ahora imaginad que ocurre todo lo contrario, es decir, que cuando llega al santuario no hay nadie allí, sólo el santo al cual ha ido a ver, por lo que puede ir directamente a tocarle y besarle los pies, que es lo que se hacía en estos casos. Qué suerte! ¿verdad?
Pues bien, a eso precisamente se refiere esta frase. Llegar y besar el santo significa tener suerte nada más llegar, desde el principio.
Por ejemplo: “Empezó el partido y la primera vez que llegaron a la portería contraria, metieron un gol. Fue llegar y besar el santo”. Pues eso, que tuvieron mucha suerte nada más llegar.
Otro ejemplo. “Envió su curriculum a la empresa y enseguida la llamaron para empezar a trabajar en ella. Fue llegar y besar el santo”, es decir, que tuvo mucha suerte porque en cuanto necesitó el trabajo, lo encontró.
El último: “El otro día entré en una discoteca y nada más entrar una chica guapísima se acercó a hablar conmigo. Chico, fue llegar y besar el santo”, je je, lo dicho antes, que el chico tuvo una suerte inmensa nada más entrar en la discoteca.