La Festividad de la Santísima Trinidad es una fiesta variable que viene a caer casi a mediados de la primavera, cuando nuestros pueblos estan llenos de flores y de rosas. En Deza era una de las fiestas que se celebrababan con más pompa. Salía de la iglesia una procesión con la imágen de Santa María de Deza a la que las mujeres le cantaban unos cánticos específicos y pasando por la Calle de la Red, la Plaza, la Calle de San Martín y el Paseo de Algadir, llegaba hasta la explanada de la ermita de Santa Ana. Al pasar por las Ollerías los fieles que estaban en la plazuela echaban flores de las acácias y pétalos de rosas, desde lo alto, al paso de la Virgen. A la llegada a Santa Ana, el sacristán bandeaba la bandera, con admiración de grandes y pequeños, una bandera de muchos colorines y que a mi particularmente me resultaba preciosa. En mi niñez no había visto nada parecido y tan bonito.
También he de añadir que en este día, hará de esto sesenta y cinco años, fué la primera vez que yo vi disparon de cohetes, cuando salía la procesión, durante el trayecto y al retorno de la misma a la iglesia. Solo me atreví a mirar el último disparo y con el se me fue el miedo que me produjeron los primeros. A partir de entonces fui siempre muy aficionado a la pirotecnia. Vale abuelo... Un abrazo.
También he de añadir que en este día, hará de esto sesenta y cinco años, fué la primera vez que yo vi disparon de cohetes, cuando salía la procesión, durante el trayecto y al retorno de la misma a la iglesia. Solo me atreví a mirar el último disparo y con el se me fue el miedo que me produjeron los primeros. A partir de entonces fui siempre muy aficionado a la pirotecnia. Vale abuelo... Un abrazo.
