Si bien, no se trata de la facha más bella y adornada. Cuando se construyó el templo, la plaza que hoy se denomina de Anaya no existía; era un lugar lleno de casitas y al proyectarse la catedral no se valoró tener la fachada norte tan trabajada como la de poniente (que es la principal) o la del sur (Patio Chico) ya que la proximidad de las viviendas impedirían el lucimiento del posible trabajo. Durante la ocupación francesa de la ciudad durante la Guerra de la Independencia, por orden del gobernador ... (ver texto completo)