Desde el patio barroco de la Clerecía. Universidad Pontificia.
La más hermosa vista de este maravilloso mundo es ver a la clase privilegiada disfrutando de sus privilegios.
os deseo mucha felicidad y no olvideis que el beso es una forma de diálogo.
en el verdadero amor, no manda nadie, obedecen los dos. Si dices la verdad no tendras que acordarte de nada.
La cúpula de la Iglesia de La Clerecía supera los 50 metros de altura.
Entrada a las Escuelas Menores con los tres escudos imperiales simbolizando el poder de Carlos I de España y V de Alemania.
Vista de la Universidad desde el Patio de Escuelas. En el centro la estutua en bronce de Fray Luis de León; al frente, la magnífica portada plateresca de la Universidad; a la derecha la fachada gótico-renacentista
del Rectorado; y al fondo, la torre barroca de la Catedral.
la Universidad ha representado y representa otro órgano vital de la ciudad, la “factoría” del conocimiento. Simboliza el templo del valor para conocer, del compromiso con un tiempo y un mundo, el gran templo civil, donde se recogen y veneran los valores éticos, sobre los que se construye una ciudad.
Plaza Mayor simbolizaba el corazón orgánico de Salamanca.
Una de las formas más agradables de disfrutar de la belleza y del ambiente cosmopolita de la ciudad es sentarse en una terraza y dedicarse a observar y sentir el pulso de la ciudad, ya sea de día o de noche. En definitiva, el latido de la urbe se centra en la Plaza.
Dichoso el que jamás ni ley ni fuero
ni el alto tribunal ni las ciudades
ni conoció del mundo el trato fiero;
que por las inocentes soledades
recoge el pobre cuerpo en vil cabaña
y ánimo enriquece por verdades.
Fray Luis de León.
Sentarse en la plaza al sol en invierno, es un benéfico baño de salud, para los huesos y para el espíritu. En definitiva, el sol tomado en la plaza sana.
“Este es el corazón henchido de sol
y de aire de la ciudad, el templo civil
sin otra bóveda que la del cielo.”
Unamuno
La fuerza de la vida y de las ideas.
Este Colegio Real de la Orden de los Jesuitas fue construido, entre otros, por Gómez de Mora en 1611. Los misioneros que en ella se formaron extendieron posteriormente la fe católica por el mundo. Sin embargo, la monumental obra tardó 150 años en estar terminada y cuando en 1767 la Orden de los jesuitas fue expulsada de España por Carlos III, el edificio se “cuarteó”, se dividió en partes, sufrió el abandono, las guerras, la desamortización y la ruina. Fue en 1946 cuando volvió a unirse y se fundó ... (ver texto completo)
El patio lo componen el edificio gótico de las Escuelas Mayores (1415), el Hospital de Estudiantes (1412) hoy rectorado, el edificio de las Escuelas Menores (1533) y la fachada de la Universidad (1512-1516).
Panorámica desde una de las torres de la Clerecía.