Hacia la Plaza, LAGUNILLA

(10 de Mayo de 2015)
De tarde en tarde me pierdo por sus calles. Me gusta recorrerlas, caminar sin prisas, mirar las fachadas, puertas y ventanas de sus casas; los enrejados, las balconadas o solanas de otros tiempos que, aunque ya no son tan numerosas, todavía hay; las fuentes cantarinas, a las que siendo niño iba a buscar agua fresca para comer estos días de verano. Los recuerdos de las personas que conocí y que ya no están con nosotros me llegan todavía nítidos. Cualquier detalle llama mi atención y en silencio me...