vistas del pantano desde el balcon
En lo referido a las listas abiertas, tan de actualidad, y puesto que hay quien cree sería la panacea para acabar con el estado de corrupción que tanto ha degradado la vida moral y política de nuestro país, creo oportuno hacer algún comentario.
Actualmente la Ley de Régimen General Electoral fija el sistema de listas cerradas y bloqueadas, excepto para el Senado. Sin embargo, lo que actualmente impera en casi todos los ámbitos de opinión, es que esas listas sean desbloqueadas; es decir, que aun ... (ver texto completo)
Cuando un político, tenga que dar la cara delante de los que le votan, habremos ganado algo. La solución: no difuminar su elección en distritos demasiado grandes; cuanto más pequeños, mejor; dividamos las provincias en zonas; los pueblos o ciudades en barrios; que el político en cuestión baje a la arena y se mezcle con sus posibles votantes; que por necesidad se tenga que sentir identificado con lo que pregona. Imaginemos que dividimos Lagunilla en siete barrios, uno por cada concejal, y que éstos ... (ver texto completo)
Por lo que las encuestas nos dicen, vamos a una cámaras legislativas –no importa mucho el ámbito, aunque el central nos afecta a todos- con muchos grupos políticos –más de uno, sin posibilidad de formar grupo propio- y ninguno con suficientes diputados para sumar la mitad más uno que permita tener la mayoría de los 350 que conforman el pleno del Congreso; lo cual, si se quiere gobernar obligará a pactar entre los distintos grupos.

¿Esto es positivo o negativo? Pues depende. Siempre que haya voluntad ... (ver texto completo)
En lo referido a las listas abiertas, tan de actualidad, y puesto que hay quien cree sería la panacea para acabar con el estado de corrupción que tanto ha degradado la vida moral y política de nuestro país, creo oportuno hacer algún comentario.
Actualmente la Ley de Régimen General Electoral fija el sistema de listas cerradas y bloqueadas, excepto para el Senado. Sin embargo, lo que actualmente impera en casi todos los ámbitos de opinión, es que esas listas sean desbloqueadas; es decir, que aun tratándose de listas que presenten los partidos, exista la posibilidad de que los electores señalen a quienes dan su voto y, en consecuencia, descarten a quienes no quieren. De esta forma, determinada gente que aparece en una lista, pueda ser descartado por corrupto o que exista presunción de serlo.
¿Pero cómo hacer esas listas o elegir a representantes políticos? Hay distintas formas. Solo citaré tres:
1. Elegir un solo escaño por distrito. En una única papeleta llena de nombres y apellidos, con las siglas o anagramas de los partidos, los electores señalan a un solo candidato. Como son varios para un solo escaño, lo que se produce es una competencia en cada proceso electoral y, por lo tanto, los electores eligen en función no solo de lo que ideológicamente representa, también se tiene en cuenta otras cuestiones: honradez, implicación con la problemática del distrito al que quiere representar, cercanía a cuerpo electoral, conocimiento, etc.

2. Relacionados en una especie de “sábana” todos los partidos que se presentan y sus respectivos candidatos. El elector, tiene opción de elegir una única lista con todos sus elegibles o señalar a distintos candidatos de diferentes siglas hasta completar la totalidad de elegibles para una zona o distrito.

3. Agrupaciones de Electores. Normalmente, se eligen a los candidatos mediante un proceso asambleario y, para poder constituirse, es necesario reunir un número variable de firmas de los inscritos en un censo electoral. Forman una candidatura para un proceso electoral concreto y determinado.
Hay más fórmulas, lo importante es que el elector tenga la posibilidad de elegir directamente al candidato que desea le represente.
Ahora bien, desde mi punto de vista, lo que actualmente tenemos en vigor según la LRGE y lo que se está proponiendo, a efectos de corrupción, puede ser tan positivo una forma, como la otra; sin obviar, que cada una de ellas también puede tener su parte negativa. Creo, que lo importante para acabar con la corrupción, no es la forma de elección de los representantes, lo ideal sería que los partidos políticos se limpiasen así mismos. Es decir, existieran los mecanismos para que los partidos no aceptaran en su seno personas corruptas.
El “quiero listas abiertas para poder tachar a los corruptos de una lista concreta”, implica reconocer y admitir que en una lista hay gente corrupta; lo cual, debe ser totalmente inaceptable. Por ello, entiendo, que lo más importante es no llevar en una lista gente corrupta y esto es lo que debe exigir el cuerpo electoral. ¿Cómo exigirlo? Castigando en las urnas a las siglas con corruptos, esta es la única solución. Lo cual, sin duda, nos lleva a la responsabilidad que cada ciudadano debe asumir como elemento socializado dentro de la comunidad y la imperiosa necesidad de que el elector tenga distintas posibilidades de elegir.
Los dos partidos mayoritarios se juntan y acuerdan pactos para acabar con la corrupción, pero en la realidad no hacen nada por eliminarla de su propio seno. Incluso, eufemísticamente, elaboran códigos éticos o de buenas prácticas, con la intencionalidad única de lavar su imagen, pero sin el propósito de apartar a dudosos y no tan dudosos. Sin citar a nadie, observamos, que proceso tras proceso, en las listas aparecen personas imputadas o próximas a la corrupción.
La gente, harta de la situación, durante el M-15 –en 2011- comenzó a manifestar su descontento. Durante semanas ocupó plazas y espacios públicos, se hicieron asambleas con infinidad de propuestas y se pidió cambio. Nadie en los partidos tradicionales se hizo eco de lo que públicamente se ponía de manifiesto. La situación se ha ido deteriorando y la audacia de los corruptos ha llegado a las altas instancias del Estado. No hay institución que no esté tocada. La degradación a la que se ha llegado ha hecho que la gente empiece a “pasar” de lo tradicional y se organice canalizando sus ideas por otros cauces.
La gente buscó otras alternativas; se ha organizado y pasa a la acción. Se hicieron otras listas bajo siglas nuevas, se reivindicó aquello que la gente pedía en el foro público y se sometió al veredicto de las urnas en las europeas del año pasado. El resultado, una formación de nuevo cuño y, otra que tenido carácter regional, pasa a extenderse al resto de España con serias posibilidades de enterrar el bipartidismo imperante.
Es deseable la existencia de nuevos partidos, con nuevas alternativas y propuestas; con nuevas gentes y nuevos talantes; con nuevos modos de hacer y sin historial negativo. Parece que ya los tenemos. Ahora, sería necesario se diera una verdadera competencia entre las distintas formaciones, y, como no puede ser de otra forma, para poder competir, tendría que existir igualdad de oportunidades entre quienes aspiran a ser elegidos.
Quienes obtengan un escaño tendrán mucho trabajo por delante para revertir la actual situación. Tendrán que implementar mecanismos de aviso en el sistema, para que no solamente quede el camino de denunciar; tendrán que democratizar los partidos por dentro (haciendo posible que dentro de cada partido, se pueda elegir entre uno y otros representantes); deberán despolitizar las altas escalas de la administración; deberán establecer más mecanismos de participación del cuerpo electoral, votar una vez cada cuatro años es insuficiente; tendrán que hacer efectiva la separación de poderes que caracteriza a todo sistema democrático; tendrán que existir unos medios de comunicación independientes del poder político y del económico; la justicia tiene que ser independiente y justa; el Estado debe garantizar algunas cuestiones básicas: Educación, sanidad, pensiones… ... (ver texto completo)
HABLAR DE POLÍTICA

Hoy es un gran día ¡Por fin hablamos! Empezamos a pensar con la madurez necesaria de un pueblo libre, aceptamos los diferentes puntos de vista sin ofuscaciones; ahora podemos admitir que nuestros ideales cambian al ritmo de nuestra sociedad; evolucionamos hacia sus nuevos contextos. Somos ciudadanos nuevos, regenerados en el amparo de nuestras libertades y haciendo uso de las herramientas que éstas nos han puesto para mantener o cambiar, según las necesidades, de un gobierno ... (ver texto completo)
Lamentándolo, no concibo que la gente tenga, según en qué foros, que dejar de habar de determinados asuntos. Muchas veces he escuchado: “no debe hablarse de política, de religión o de fútbol! Al parecer, algunos entienden que hablar o escribir de estas cuestiones es abrir un melón que puede generar conflicto entre las partes que intervienen en un debate y, seguramente, según en qué ámbitos o con qué personas se debata, así puede ser. No lo niego y ni lo oculto, tampoco rehúso tratar el tema.
Es ... (ver texto completo)
Hola Juan Antonio. Vamos sobre la cuestión. Me parece bien tu postura. Simplemente, y esta conversación en la red quizá sea prueba de ello, quería comentar y de alguna forma explicar que cuando no nos vemos, ni nos conocemos personalmente, como es nuestro caso, las palabras escritas pueden tergiversarse o no interpretarse como lo hace quien las escribe. Me gusta mucho hablar de política, pero la red me ha deparado también muchos roces por lo mismo que conté antes... yo quiero decir tal cosa, el que lee entiende otra o no capta el tono, en fin, sinsabores que cuando hablo con alguien cara a cara no suelo tener. Otra cosa es la discrepancia, que me parece buena. Aquí no suelo intervenir porque personalmente sólo conozco a dos o tres y muchas cosas particulares de cada pueblo se me escapan. No sé si me explico bien. Por lo demás espero que cada uno pueda seguir expresándose libremente, algunos conocimos otra época ¿no es cierto? Por mi parte seguiré leyéndoos como hago habitualmente. Un cordial saludo. ... (ver texto completo)
No soy lector de este periódico, pero me ha parecido interesante el análisis de este articulista del El Observador. Al hilo de lo comentado en este foro quiero compartir parte del mismo.

Por Antonio Maza Pereda | Red de comunicadores católicos |

“No hay que hablar de política ni de religión”, reza el dicho. “Es una falta de cortesía. La gente se incomoda. Y, de todas maneras, no se llega a nada. Solo se pierde  la cordialidad. ¿Para qué arriesgarnos a perder la paz?”
Este ha sido el criterio ... (ver texto completo)
Lamentándolo, no concibo que la gente tenga, según en qué foros, que dejar de habar de determinados asuntos. Muchas veces he escuchado: “no debe hablarse de política, de religión o de fútbol! Al parecer, algunos entienden que hablar o escribir de estas cuestiones es abrir un melón que puede generar conflicto entre las partes que intervienen en un debate y, seguramente, según en qué ámbitos o con qué personas se debata, así puede ser. No lo niego y ni lo oculto, tampoco rehúso tratar el tema.
Es ... (ver texto completo)
Suscribo, en general, tu punto de vista. A ver si se puede hablar y opinar sin ser tachado por la incultura de "ateo", "comunista", etc...

Un saludo. Fulgencio
Lamentándolo, no concibo que la gente tenga, según en qué foros, que dejar de habar de determinados asuntos. Muchas veces he escuchado: “no debe hablarse de política, de religión o de fútbol! Al parecer, algunos entienden que hablar o escribir de estas cuestiones es abrir un melón que puede generar conflicto entre las partes que intervienen en un debate y, seguramente, según en qué ámbitos o con qué personas se debata, así puede ser. No lo niego y ni lo oculto, tampoco rehúso tratar el tema.
Es ... (ver texto completo)
“La inmadurez es la incapacidad de usar la inteligencia propia sin la guía de otro”
Immanuel Kant
“Yo no pretendo imponer mi verdad, respeto incluso admiro las superiores, antagónicas y bien sustentadas opiniones. Asumo que el sabio puede cambiar de opinión, el necio, nunca”.
Immanuel Kant
Mujeres diversidad y talento,
desarrollan creatividad y sueños,
no se rinden con tormentas o vientos,
firmes historias van construyendo.
(Estrofa del poema publicado en el libro Una mujer, un mar en calma de
Arjona Delia).
Mi cooperativa está atravesando infinidad de dificultades porque, en su día, no se les concedieron créditos a ciertos compradores de nuestro inmueble (supongo que lo querían destinar a nuevas empresas), ni ellos lograron su cometido ni nosotros pudimos afrontar unas nuevas cargas del crédito que habíamos contraído por absorber una cadena nueva de supermercados; un caos que nos llevó a gestionar gastos y depurar la empresa. Como resultado se cerraron varios centros que teníamos por toda España, infinidad ... (ver texto completo)
CUANDO ME ABURRO

Ese amanecer espeso, cansado del día anterior, me deja anclado en casa; sin intención de salir. Abro la ventana que da a la calle, dejo que una fresca brisa se cuele y me golpee la cara ¡Vaya domingo! Fresquito pese al tímido sol. Enciendo un purito de los pocos Panter que me quedan mientras conecto el ordenador y respiro profundo, sin saber qué es lo que voy a consultar para distraerme. Y, al poco, ya he entrado en la página de pueblos de España ¿Por qué? Será verdad eso que ... (ver texto completo)
“La democracia está muy bien, pero sin elecciones es más segura”
Mijail Sergeyevich asesor de Corbachov
VUELVE EL SOL

Parece que los días grises han pasado, sale el sol; ya tenía ganas. Por aquí no ha hecho más que llover. Empiezan las romerías y pronto veremos florecer nuestros campos estimulando felicidad ¡Cuánto poder tiene el sol!
Bonita foto Pedro
Hola. No sé quien eres y no suelo entrar en conversaciones de políticas así, por escrito, porque a veces surgen malentendidos, que el tono de la conversación cara acara evita. Pero no puedo resistirme a hacerte una pregunta ¿qué entiendes por democracia directa? ¿cómo se gestionaría? No hablamos del concejo abierto de un pueblo de estos nuestros donde se juntan los vecinos y podría hacerse algo parecido a una asamblea. ¿Cómo se haría entonces?
Por lo que las encuestas nos dicen, vamos a una cámaras legislativas –no importa mucho el ámbito, aunque el central nos afecta a todos- con muchos grupos políticos –más de uno, sin posibilidad de formar grupo propio- y ninguno con suficientes diputados para sumar la mitad más uno que permita tener la mayoría de los 350 que conforman el pleno del Congreso; lo cual, si se quiere gobernar obligará a pactar entre los distintos grupos.

¿Esto es positivo o negativo? Pues depende. Siempre que haya voluntad de entendimiento y no de imposición de los postulados o propuestas maximalistas de cada uno de ellos y permitan sacar adelante las propuestas legislativas que hagan gobernable el país será bueno; pero si por el contrario, cada cual se encastilla en las suyas y no ceja en sus exigencias y se produce inestabilidad en el gobierno y nos aboca a elecciones anticipadas cada dos por tres, puede que no lo sea tanto.

Alguien dirá que en Italia, por ejemplo, llevan así toda la vida y el país sigue adelante. Y no le faltará razón; pero parodiando a un ex primer ministro de España, habría que decir “que seríamos como Italia, pero sin italianos” y, por lo tanto, esto es harina de otro costal. En cualquier caso, experimentemos y se verá…

Hay quien reclama democracia directa, listas abiertas, etc. Muy bien, opino que todo ello se puede hacer; eso sí, no sin riesgos y con el consiguiente coste.

Cuando se habla de democracia directa del mundo antiguo –y la de Atenas en particular- se tiende a destacar de ella la existencia de una Asamblea Popular (Ekklesia) en la que el pueblo reunido ejercía el poder. Eran los ciudadanos, directamente, los que se congregaban para tomar sus propias decisiones políticas, detentando al mismo tiempo la titularidad y el ejercicio del poder.
Una parte de los sociólogos de la política intuyen dificultades varias, incluso afirman: “ que una democracia directa completa es imposible en nuestro días al menos en el ámbito nacional de la política pero que, sin embargo, una democracia representativa pude contener más o menos mecanismos que permitan la participación ciudadana directa en la dinámica política de un país”

Argumentan sobre la responsabilidad del individuo aisladamente, pasando por la necesidad de comprensión de los distintos temas propuestos, del estudio de los mismos, de los debates públicos, de la capacidad de proponer e interpelar para cada individuo, sobre la forma de votar su aprobación –urna o mano alzada-, elección de candidatos para implementar lo aprobado y como serían elegidos (sorteo, antigüedad, votación, paridad de género, etc.), mandato imperativo, consultar o no TODOS los asuntos o solo los de especial transcendencia, referéndums, plebiscitos, revocación de los elegidos por causas sobrevenidas, etc.; obviamente, a nadie se le escapará el tiempo que se necesitaría en todo el proceso y, por supuesto, el gasto económico que todo ello representaría; no desmereciendo, en ningún caso, la implicación necesaria de todos y cada uno de los ciudadanos.

En descargo del tiempo y gastos, habría que añadir la existencia de soluciones que hace unos años ni soñábamos: los TICs. Hoy el proponer, debatir, votar y un sinfín de cosas pude hacerse a través de estos medios, el problema: no todos los conocen y manejan; amén de que tampoco están exentos de manipulaciones por la falta de seguridad total.
Reunidos todos esos elementos, nos falta un líder, una élite y, como todos nos podemos ser, no damos la talla o simplemente nos resbala todo esto; alguno o algunos, son o serán quienes agiten el patio y, en esto como en otros asuntos de la vida, no se puede ir por libre o plan francotirador; es necesario agruparse y organizarse; elaborar unas normas de funcionamiento y acatarlas.

Este camino ya lo ha recorrido la humanidad. Son miles de años de práctica, si bien es verdad, que la democracia no era como la actual, puesto que se partía de diferencia de derechos en función de ser ciudadano o esclavo, hombre o mujer, tener rentas o no tenerlas…
Sobre democracia directa hay experiencia, aunque sea a nivel reducido, caso de algunos lugares de los Estados Unidos (California) o en muchos de los 26 cantones suizos. Incluso, en Suiza cuando hay elecciones para elegir representantes a tal o cual órgano se pregunta a la gente sobre cosas concretas que les atañen.

La democracia nunca está completa, no puede parar de profundizarse y desarrollarse. Un sistema democrático que permanezca estático y sin cambios degenerará y se convertirá en antidemocrático.

La democracia puramente representativa se corresponde a aspiraciones que se remontan a más de un siglo, donde la gente era capaz de encontrar sus ideales políticos en pequeños grupos de creencias humanas y sociales, encarnados por grupos conservadores o liberales, democristianos o socialistas… Este tiempo pasó. Ahora las ideas y juicios de la gente se han convertido en algo más individualizado.
La gente ahora quiere una democracia donde se tenga en cuenta una serie de principios, que siempre se definieron en democracia, pero que muchas veces se olvidan:

El principio de participación (no hay autoridad por encima del pueblo), el referéndum, el plebiscito, de igualdad, el de derecho de iniciativa popular, el de mayoría, el del mandato, el de petición.

Y por supuesto, como diría el ex presidente Uruguayo José Mújica: “Hay gente que adora la plata y se mete en la política, si adora la plata que se meta en el comercio, la industria, que haga lo que quiera, no es pecado, pero la política es para servir a la gente. A los que les gusta mucho la plata hay que correrlos de la política, son un peligro”.

En otro momento comentaremos algo sobe las listas abiertas, aunque sobre las posibilidad de desbloquearlas ya hay un pronunciamiento del nuevo líder socialista. ... (ver texto completo)