BARBADILLO: Si alguien se plantease un calificativo para la situación...

Si alguien se plantease un calificativo para la situación de nuestro pueblo posiblemente fuese el que lo "tiene demasiado oscuro", pues bien esa faceta es el de la mayoría de los pueblos que conocemos. La falta de recursos tanto humanos como económicos, el no estar en ningún enclave estratégico y el no pintar nada y para nada en los planes de desarrollo social para los políticos, parece un enfermo en fase terminal al que espera una agonía más o menos lenta.
MATEO MARTIN BERROCAL, en su libro La II República y la Reforma Agraria en Rollán, (libro que os recomiendo) muy acertadamente ya vaticinaba los males que aquejan a nuestros pueblos: "falta de ilusión, despreocupación por mejorar las condiciones de vida del pueblo, DESINTERÉS CULTURAL, (ello lleva la pérdida de nuestras tradiciones) y un excesivo miedo o preocupación por la crítica de otros o por el qué diran...
Pues bien, llevo treinta años visitanto tanto Barbadillo como Villoria, el primero ha perdido toda o casi toda perspectiva de futuro, en cambio Villoria es uno de los pueblos más florecientes en los últimos años, donde sin intervención de la gran industria (leasé chacinera como en Guijuelo) y perdido en una carretera secundaria de nuestra geografía provincial, ha sabido por él mismo y por la unión de sus habitantes el encarar con optimismo el futuro.
La semana pasada fue la "semana cultural" donde un sin fin de actuaciones dedicadas a todas las edades (por cierto, el sábado acudí a ver la obra de teatro "YERMA" de F. G. Lorca), enlazan con esta semana donde se celebran sus fiestas patronales, entre ellas tres festejos taurinos, deportes, verbenas y un largo etc. para acabar con la comida de la vaquilla que ofrece el Ayuntamiento a todos los vecinos. A ella acuden "TODOS" sea cual sea su signo político o sus afinidades de voto, acuden en plan familiar o en pandillas juveniles y se come en la plaza. La fiesta se inicia con la misa solemne a la que acude tanto el alcalde como los demás concejales como representantes del pueblo, se realiza la procesión con mujeres vestidas de charras con cánticos y música de charanga, se bailan jotas y después se ofrece un ágape en el gran salón de Ayuntamiento, para todos, siendo presidido tanto por el alcalde como por todos los concejales.
La plaza de toros que posee, se inició por prestación social de los labradores llevando la tierra para los asientos, muchos otros colaboraron en ella hasta ser hoy día uno de los lugares de referencia en los festejos, los alrededores de la misma es una zona ajardinada.
El frontón, mejor dicho el pabellón deportivo, hoy día es la base de escuela de pelota de Salamanca. Personas aficionadas se han encargado de enseñar y mantener este deporte a las generaciones alevines, en él se hacen veladas de espectáculos deportivos de varias modalidades...
El teatro que tiene Villoria es uno de los más modernos que existe en la provincia. Trescientas cómodas butacas y sobre todo las atracciones teatrales y espectáculos tradicionales hacen que se quede pequeño este aforo para la participación y asistencia de la gente de este pueblo a estos eventos culturales.
El complejo deportivo con sus piscinas atrae tanto a los peques como jóvenes y no tan jóvenes del pueblo que quieren pasar un verano agradable.
La oferta de bares-pub-disco de la carretera alternan su ambiente entre la tarde noche para los que ya vamos entrando en edad y la noche más cerrada para los jóvenes.
El centro médico, donde no solo hay consulta de médico de cabecera, sino también podologo, dentista, ginecólogo, etc...
Villoria, dejó a un lado sus diferencia y todos juntos se subieron al carro que le ofrecía el futuro. Nada, o casi nada, debe a los de fuera, tan solo el tesón y el esfuerzo de sus gentes ha hecho que este pueblo haya prosperado como lo merece.
Villoria es defendido por todos sus habitantes que lo tienen como si fuese el hombligo del mundo, al principio me hacía gracia, pero hoy día no puedo menos de sentir admiración por esta gente que a pesar de la política se mantienen unidos en lo concerniente a su pueblo.
Mañana y pasado estaré en sus fiesta, es un pueblo generoso que a todos acoge amablemente. Merece la pena hacer una visita y disfrutar de su ambiente.
Un saludo. Rober
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Rober soy Leo, tu prima segunda, que soy asudua lectora de tus artículos. He leido la triste situación de nuestro querido pueblo y su comparación con Villoria, que está casi a la misma distancia de la capital, mi marido catastró los pueblos de esa zona en los años 49 al 56 y entonces tenían casi todos el mismo número de habitantes que Barbadillo entre 1.000 y 1.600 con medios de vida similares. Tienes razón en que nuestros paisanos no han tenido el empuje que se necesita para prósperar y que hay ... (ver texto completo)