Soria, Palencia y Teruel fueron señaladas ayer por el portal Niumba como las ciudades más tristes de España. Justa o injusta, la afirmación se ha basado en las votaciones de los usuarios de este portal especializado en el alquiler de apartamentos veraniegos.
Curiosamente no es la vida nocturna, la estética o el patrimonio cultural lo que han valorado el medio millar de personas que han votado en esta web. Casi la mitad de los encuestados (un 45,3 %) coincide en que la calidez y la cercanía de los autóctonos es el factor que más influye en su relación con una ciudad y en la sensación que le queda a un viajero sobre un lugar. Por tanto, los palentinos seríamos los segundos menos cercanos del país. Otro apartado es el ambiente y la energía que desprenden sus calles.
Con estos datos, las ciudades más alegres son Madrid y Barcelona, seguidas de Cádiz, Málaga y Granada. Por contra, nueve de cada cien votantes (en torno a 45) señalaron a Palencia como la provincia más triste «por carecer de buen tiempo, por la poca variedad en las alternativas de ocio y la cercanía de sus gentes hacia los visitantes». Según los promotores, no es que Palencia «no tenga un gran valor cultural, patrimonial y natural, que lo tiene».
Eso es lo que opina un millar de personas de todo el país. ¿Pero qué creen los palentinos?. La opinión en ‘casa’. División de opiniones. Desde palentinos que se han sentido ofendidos por el resultado de esta encuesta a los que, con la cabeza gacha, reconocen algo de razón en la calificación de tristes.
«Creo que de tristes nada. Todo lo contrario», aseguraban Laura y Luis Ángel en la Calle Mayor.
«No creo que seamos los más tristes de España. A ver... todo depende de las personas con las que te encuentres, pero en general no», afirmaban los jóvenes Raúl y Estefanía. Sin embargo, Toñi y José Luis, una pareja adulta, reconocen que «algo de alegría sí se ha perdido. Es verdad que en todos los sitios, pero aquí se nota en la calle, en los comercios...».
«Sobre todo a partir de las nueve de la noche, o los fines de semana, parece que Palencia es una ciudad fantasma», apuntaban Agustín y Rosa María. Pero para otros, quienes han votado han confundido dos aspectos diferentes: paz y tranquilidad con tristeza.
«Si comparamos con Madrid o Barcelona, Palencia tiene menos oportunidades de ocio, pero aquí tenemos calidad de vida, cosa que en esas ciudades no», afirma Beatriz. Algo refrendado por Mónica que asegura que quienes votaron «creen que paz es tristeza, cuando eso es calidad de vida».
Desde el Ayuntamiento capitalino y la Diputación se mostraron sorprendidos de esta noticia. «Me niego a creerlo. Sólo puedo afirmar que la gente que ha votado así es que no conoce Palencia», explica la concejal de Turismo y vicepresidenta de la Diputación, Carmen Fernández. Como consejo, «que vengan y conozcan de verdad Palencia».
MI OPINIÓN: Alegre, triste, divertida o no, solo es cuestión de gustos. Yo la califico entre las más atrasadas.
Curiosamente no es la vida nocturna, la estética o el patrimonio cultural lo que han valorado el medio millar de personas que han votado en esta web. Casi la mitad de los encuestados (un 45,3 %) coincide en que la calidez y la cercanía de los autóctonos es el factor que más influye en su relación con una ciudad y en la sensación que le queda a un viajero sobre un lugar. Por tanto, los palentinos seríamos los segundos menos cercanos del país. Otro apartado es el ambiente y la energía que desprenden sus calles.
Con estos datos, las ciudades más alegres son Madrid y Barcelona, seguidas de Cádiz, Málaga y Granada. Por contra, nueve de cada cien votantes (en torno a 45) señalaron a Palencia como la provincia más triste «por carecer de buen tiempo, por la poca variedad en las alternativas de ocio y la cercanía de sus gentes hacia los visitantes». Según los promotores, no es que Palencia «no tenga un gran valor cultural, patrimonial y natural, que lo tiene».
Eso es lo que opina un millar de personas de todo el país. ¿Pero qué creen los palentinos?. La opinión en ‘casa’. División de opiniones. Desde palentinos que se han sentido ofendidos por el resultado de esta encuesta a los que, con la cabeza gacha, reconocen algo de razón en la calificación de tristes.
«Creo que de tristes nada. Todo lo contrario», aseguraban Laura y Luis Ángel en la Calle Mayor.
«No creo que seamos los más tristes de España. A ver... todo depende de las personas con las que te encuentres, pero en general no», afirmaban los jóvenes Raúl y Estefanía. Sin embargo, Toñi y José Luis, una pareja adulta, reconocen que «algo de alegría sí se ha perdido. Es verdad que en todos los sitios, pero aquí se nota en la calle, en los comercios...».
«Sobre todo a partir de las nueve de la noche, o los fines de semana, parece que Palencia es una ciudad fantasma», apuntaban Agustín y Rosa María. Pero para otros, quienes han votado han confundido dos aspectos diferentes: paz y tranquilidad con tristeza.
«Si comparamos con Madrid o Barcelona, Palencia tiene menos oportunidades de ocio, pero aquí tenemos calidad de vida, cosa que en esas ciudades no», afirma Beatriz. Algo refrendado por Mónica que asegura que quienes votaron «creen que paz es tristeza, cuando eso es calidad de vida».
Desde el Ayuntamiento capitalino y la Diputación se mostraron sorprendidos de esta noticia. «Me niego a creerlo. Sólo puedo afirmar que la gente que ha votado así es que no conoce Palencia», explica la concejal de Turismo y vicepresidenta de la Diputación, Carmen Fernández. Como consejo, «que vengan y conozcan de verdad Palencia».
MI OPINIÓN: Alegre, triste, divertida o no, solo es cuestión de gustos. Yo la califico entre las más atrasadas.
