Callejòn de las Flores. Calle Trascorrales. Calle Atonio Arana. Aquì pasè muchos veranos de mì infancia.
Claro que sì, Magos.
Pero el tiempo es inexorable.
Menos mal que disponemos de algo sumamente importante: La memoria, que nos permite revivir lo bueno y como no, tambièn las penas, que siempre nos envuelven, ya que es ley de vida.
La piedra, estaba situada justito en la esquinita de la casa de Patro. En esta foto no se ve la casa de mìs tios, pero ya sabes que estar si que està. Que chiquyitita era, pero cuanta vida atesorò. Cuantas alegrìas. Que felices eramos y con que pocas cosas.
Un beso...
Cristina y Magos, cuando paso por vuestra calle pienso en lo bonitas que han quedado las casas con las fachadas arregladas. Creo que es de las calles de Herrera que cuenta con más casas con su fachada renovada. Besos para las dos.
Es verdad que el callejón está pelado, ¡pero de pobre, nada! con las fachadas de las casas arregladas está bonito, a mi me parece más grande ahora, aunque no te discuto que las flores le daban una alegría especial. Ün beso
Mi callejón de las flores: Qué trstón se la ve ahora tan pelado, sin una sóla planta ni un triste geranio. Justo en esa eaquína estaba la piedra donde todos los chiguitos nos pegabamos por sentarnos.
Pobre callejón. ¡Quién lo a visto y quién lo ve!
Un abrazo Jose Luis.
Claro que sì, Magos.
Pero el tiempo es inexorable.
Menos mal que disponemos de algo sumamente importante: La memoria, que nos permite revivir lo bueno y como no, tambièn las penas, que siempre nos envuelven, ya que es ley de vida.
La piedra, estaba situada justito en la esquinita de la casa de Patro. En esta foto no se ve la casa de mìs tios, pero ya sabes que estar si que està. Que chiquyitita era, pero cuanta vida atesorò. Cuantas alegrìas. Que felices eramos y con que pocas cosas.
Un beso...
Cristina y Magos, cuando paso por vuestra calle pienso en lo bonitas que han quedado las casas con las fachadas arregladas. Creo que es de las calles de Herrera que cuenta con más casas con su fachada renovada. Besos para las dos.
Es verdad que el callejón está pelado, ¡pero de pobre, nada! con las fachadas de las casas arregladas está bonito, a mi me parece más grande ahora, aunque no te discuto que las flores le daban una alegría especial. Ün beso
Mi callejón de las flores: Qué trstón se la ve ahora tan pelado, sin una sóla planta ni un triste geranio. Justo en esa eaquína estaba la piedra donde todos los chiguitos nos pegabamos por sentarnos.
Pobre callejón. ¡Quién lo a visto y quién lo ve!
Un abrazo Jose Luis.