Tienes razón Arambol, muchas familias lo vendían y otras, como en mi casa, al parecer se lo comían. Si ahora existen, se habrán convertido más bien en un hobby o en un entretenimiento de algún miembro de la familia. Desconozco mucho el campo, sólo sé como tú la dedicación permanente que llevaba. Mis abuelos tenían, tienen, un huerto en la Jericó y ha sido su vida. El recuerdo de mi abuelo era que si no estaba en la panadería, trabajando, estaba en el huerto. Casi nunca alternaba porque no le gustaba ... (ver texto completo)
Lydia, con tus travesuras de chiguita me provocaste una carcajada ahora con la historia de tu abuelo me has provocado un escalofrio. Un beso fuerte y gracias por compartir esas vivencias
