NOCHE DE REYES

Rogelio estaba blanco, estaba nieve,
con la frente al cristal, cristalizada,
fuera del vidrio ya, junto a la helada
escarcha de la noche…era tan breve,

tan tímido su aliento, era tan leve
su existir en la espera ilusionada,
como un pecho de virgen desvelada ... (ver texto completo)
LUCES, LUCES, todo luces, las que ponen para deslumbrarnos.
Caras sonrientes, poses buscadas, sonrisas de dentista, blancas, frías, finas.
Trajes de festejar, fotos para la familia, para engañar amigos, bolsillos vacíos, almas secas, como pellejos colgados a secar en un varal.
Tantos deseos buenos, deseados con palabras vacías, gastadas, tres frases hechas que no dicen nada. Nos espera un mañana impreciso, temeroso, oprimido, sin libertad de las palabras ni de las obras, abundantísima carne de ... (ver texto completo)
Esta noche estoy triste.
Me han asaltado, en tropel, un montón de recuerdos y muchos más momentos de realidad.
Comentaba con Miguel, uno de mis queridos enemigos, los achaques que nos están asaltando la relativa tranquilidad y seguridad que nos da la jubilación.
Resulta que unos días atrás, el cuerpo le avisó que estaba llegando a una curva de la irreal carretera por la que circulamos, y que allí, se había de reducir la velocidad, para no salir despedido por la inercia, hacia el barranco hondo, ... (ver texto completo)
Yo, como los yogures, tengo fecha de caducidad.
Ya se cumplió el límite. Días ha, muchos días, muchos, si estás esperando.
Tan bien puedo decir que me han echado para atrás, tres veces, tres.
Una voz decía: no es hora. Otra ordenaba: ¡espera!
¡Tantas cosas para hacer y, sin saber cuáles!
En al cuerpo cansado, en la mente dormida, aún quedan rescoldos de verdades que vivimos en otros días.
Azul y limpia despertó la mañana.
Es día de despedida.
Sol y brisa, hermoso día en que la primavera ríe.
Al polvo te envían.
En el cielo hay fiesta, alegres, esperan a la puerta.
Las sandalias, tras largo camino, no están manchadas.
Pasad, la vida empieza.
Hasta pronto.
Y pasaré a buscarte…Sí.
El domingo, cuando el sol despierte.
Con el aire puro de la mañana.
Sí, yo iré a buscarte.
Cuando despiertan las rosas y antes que vuelen las mariposas.
Sí, allá, donde las cuidaba Amaro, donde fuera el callejón de los misterios.
Vendré a buscarte, porque es Domingo de Ramos…
Y llevaré dos de romero…
Uno para ti, uno para mí.
Y haremos repicar la Chica, para escuchar su voz de plata. ... (ver texto completo)
Quietos, quietos estén los cielos.
Quietos los suelos. Quietos.
Que nada rompa el silencio.
Despidiendo al amigo, lleno está el pueblo de jóvenes y viejos.
La campana gorda, tañendo está a duelo.
Las ondas que el bronce lanza al viento, lanzas son que atraviesan los corazones.
Ojos míos, ¡soltad dos lagrimones!
Tu presencia seguirá, Eduardo, por todos los rincones.
Con la vista nublada, alcé mi copa al cielo, por ti, que viviste tan poco tiempo, y vi un camino marcado con una jota, que llegaba ... (ver texto completo)
Aquí ha llovido.
Hace frío.
El cielo es gris, apagado, como sin ganas.
Este marzo, ya mediado, sin sol ni viento, gris y quieto, tiene pocos parientes en mi recuerdo. Los más, son más bien de días cálidos, crecidos, con atardeceres luminosos.
Pero no todos.
Recuerdo un día, ya muy, muy lejano, en que yo era un chaval soñador, pero el campo no entendió nunca de sueños y me tenía con las manos en el mango del azadón cavando barcillares, con el viento cortante entrando por los agujeros del viejo ... (ver texto completo)
Es la hora de los puros.
Las gallinas, los zorros, las culebras, los bueyes con la cerviz bajada, tienen su tiempo y ahora disfrutan regodeándose al sol de febrero.
Hasta los más miserables tienen su día, su momento.
¿Fue Jesús, quien dijo aquello de: quien esté libre de culpa, (pecado) que tire la primera piedra?
Es la hora de los puros.
De los puros de fumar.
¡Que se hagan humo!
Terminando los días de este año marrano, pasan cosas que no me dan el placer que otrora me dieran. Sí, aniversario, brindis, buenos deseos de amigos en la distancia, y fe y esperanza y ganas de seguir que aún me quedan, pero en el otro plato de la balanza se van amontonando crespones negros, adioses sin presencia, imágenes de luz de una tarde agosteña, mientras la voz que vuela por el espacio se queda en una conversación llena de buenos deseos, de ánimos, de palabras cansadas que dejan escapar agradecimiento ... (ver texto completo)
A las tres, tocaban a oficio de difuntos.
Había prisas por la casa. Las mujeres corrían de acá para allá. Se iban cambiando de ropa al tiempo que achuchaban a los hombres y niños para que hicieran mismo. Las niñas en esos casos ya se veían mujeres y de tal se comportaban.
¡Vamos, que están dando la segunda y mira como estamos! ¡Niño, que te limpies la cara! Si ya me lavé madre…
El oficio era un tostón, todo negro, cánticos que eran lamentos, rezos murmurados, monótonos, con palabras gastadas ... (ver texto completo)
Esta cabeza dura, vieja y dura, duele y duele.
Sigue y sigue cerrada a quienes a la puerta llaman.
El tiempo apremia, sí. Escasea.
Es verdad, sí, el tiempo escasea.
Según nuestro calendario, poco nos queda.
Pero, ¿quién sabe qué hay tras la ventana que se abre al despertar el día?
Misterios son de la vida.
¡Me cuesta tanto dejar que la vida fluya!
Esta puñetera manía mía de, (y con el mazo dando).
Siempre a Dios rogando. ... (ver texto completo)
Vaya por delante mi respeto y mi cariño.
Por delante vayan también la caha, la gorra, la sonrisa burlona y el ucho, Don Miguel.
¿Cuántos caen, jovenzuelo, 58? No sé, con los números tengo un revuelo…
Pasito a pasito vamos siguiendo el sendero.
Procesionando a San Roque, los años van cayendo.
Otra pongo en vuestro debe, porque cobrármela no puedo.
¡Felicidades Don Miguel y un abrazo muy fuerte Miguelucho!
15/8/21
Una noche de verano, noche de buscar el fresco, vi en una acera de la plaza dos figuras semi tumbadas, no recuerdo si se veían solas o si formaran parte de un corro.
En la plaza había jaleo.
Chiguitos y chiguitas, corrían, chillaban, reían; o sea que jugaban como otrora, otros lo hacíamos.
Chavales y chavalas, ya más grandes a otra cosa jugaban.
Nada nuevo. En el mundo, que ya es viejo, siendo todo siempre lo mismo, siempre todo es diferente.
Básicamente depende del rol que interpretemos.
En ... (ver texto completo)
Rogelio:
Quiero pedir disculpas a todos aquellos que no habéis tenido respuesta por mi parte cuando por el Facebook a mí os habéis dirigido. Lo siento.
Ha sido un tiempo de pocas ganas y de ilusiones menguadas, casi todas desaparecidas. El sol y la luna, ¡me encontraban tantos días en la misma esquina!
Solamente alguna despedida en pueblos (en el mío) un sitio donde se reúne más gente que en la iglesia y el sitio donde ellas vivieron, sufrieron y amaron. Buenas gentes, siempre buenas gentes.
Pero, ... (ver texto completo)