Supongo que tu desesperación tendrá justificación. Pero también es positivo que muchos quieren a su
pueblo, por lo que lo mejor será estar unidos contra el enemigo. Y el enemigo no deben ser los propios vecinos, sino esos políticos de
Cabañaquinta que nada han hecho, ni harán por
Casomera. Es que ni existimos. Yo me sumo a lo que algunos proponen. Que no se vote ese día, ni un voto del
valle de Casomera para nadie, o que se vote en blanco. Si nadie votase ya verías como sería noticia.