Susana, qué pasa con la foto?, no la han puesto?.
No, parece que aún no.
Hola, Sandra! ¡Cuánto tiempo sin leerte! ¿Qué tal por la Magdalena, hace tanto frío como creemos?
Hola, Sandra! ¡Cuánto tiempo sin leerte! ¿Qué tal por la Magdalena, hace tanto frío como creemos?
Susana lo peor no es el frio lo peor es tener que estar metida en casa, no veas los dias son añosssssssss
¡Qué me vas a contar! ¡También yo he vivido eso, je, je! Pero bueno, al menos, en cuanto sale un poquito de sol, corriendo a la calle, a aprovechar, y enseguida otra vez para dentro! Es lo que toca en estas fechas.
Por cierto, como no te había vuelto a leer, ¿encontraste profe de mates en el pueblín?
Por cierto, como no te había vuelto a leer, ¿encontraste profe de mates en el pueblín?
Lo mejor de pasar frío en la calle era meterse corriendo en casa y arimar las manos a la lumbre... era gloria bendita! ¿Tenéis vosotros cocina de leña? En mi casa aún la conservan, y creo que es el calor más rico del mundo!
susana cuando vaya al pueblin me enseñarás la cocina de leña?
¡Claro, Fermi! Cuando quieras.
¿Sabes? En lo que ahora es el pajar de mi casa, en su día fue una vivienda, y aún se ve perfectamente la estructura de la vivienda, cómo estaba todo. En el piso de abajo, las cuadras (aún tiene esa función), y en la parte de arriba, lo que ahora es pajar, era la vivienda. Así, en época de frío, el calor de los animales subía a las personas. Y como el suelo era de madera, sobre éste había como una cuarta de tierra, y sobre ella, se hacía el fuego en el suelo, y encima el puchero, de tres patas. Aún se distingue lo que era la cocina, porque por el humo, las paredes son algo más oscuras, y aún está la alacena (un hueco en la pared) ponde guardaban los cubiertos y todo.
¿Sabes? En lo que ahora es el pajar de mi casa, en su día fue una vivienda, y aún se ve perfectamente la estructura de la vivienda, cómo estaba todo. En el piso de abajo, las cuadras (aún tiene esa función), y en la parte de arriba, lo que ahora es pajar, era la vivienda. Así, en época de frío, el calor de los animales subía a las personas. Y como el suelo era de madera, sobre éste había como una cuarta de tierra, y sobre ella, se hacía el fuego en el suelo, y encima el puchero, de tres patas. Aún se distingue lo que era la cocina, porque por el humo, las paredes son algo más oscuras, y aún está la alacena (un hueco en la pared) ponde guardaban los cubiertos y todo.
