La formación del
pueblo de Fuenteúrbel como tal, así como los
pueblos vecinos, está asociada al nacimiento de Castilla, primero como Condado y luego como Reino y está, sobre todo, ligado a la
Iglesia, así como a las actividades monásticas y de los nobles de la región, en los límites de influencia entre los reinos de Castilla y
Navarra en sus luchas contra el Islam, que tuvieron por objetivo la Reconquista.
Probablemente se inicia con el proceso de la “Repoblación” por mandato del Rey Alfonso III El Magno hacia el año 884 cuando se fundan
Burgos Capital, Villadiego y otras poblaciones.
Los pobladores de Fuenteúrbel bajaron del norte, buscando mejores condiciones de vida, acompañados por algún presbítero o abad, levantaron la iglesia o algún
convento y pusieron en explotación entre 5 y 20 vecinos las tierras y pastos del lugar, próximos al
río Úrbel.
La actividad inicialmente consistió en deforestar y condicionar para la
agricultura las tierras planas y cercanas al río; el resto las usaban como pastizales para la
ganadería. Las tierras ocupadas eran del rey. Cuando el rey reconocía la ocupación, los habitantes pasaban a ser dirigidos políticamente por un conde o noble.
Así es como el lugar y sus habitantes en el año 1055 dependían del Reino de Navarra, fecha en que el padre del Cid - Diego Laínez- al servicio del rey de Castilla le arrebata a Navarra los
castillos de Ubierna, Úrbel y de un
castillo que para la fecha existía en
La Piedra construidos para defenderse de los musulmanes, éste último a menos de 2 Kms al Sur del pueblo, quedando Fuenteúrbel, justamente en el límite entre los reinos de Navarra y Castilla.
* Álvaro Ruiz Pérez.