Nave y luz de cristaleras en la catedral de Cristo Salvador, AVILA

Pero a partir de los años de la Reconquista, la zona quedó en “tierra de nadie”, dominada alternativamente por unos y otros, y habría que esperar a fines del siglo XI para su definitiva incorporación a los territorios cristianos, cuando tras la conquista de Toledo, Alfonso VI, rey de León, de Galicia y de Castilla decidió repoblar toda una vasta zona que incluyó, aparte de Ávila, otras ciudades como Segovia o Salamanca, encomendándole la misión a su yerno, don Raimundo de Borgoña, casado con su hija doña Urraca, que sería quien asentara definitivamente una sede episcopal en Ávila.
(4 de Septiembre de 2022)