Durante las fiestas patronales de San Cipriano, es costumbre el ENCIERRO DE BIDONES,en el cual los mozos de la localidad recorren las calles de la misma haciendo tañir alegremente unos bidones rellenos de piedras, a altas horas de la madrugada.
Una de las pocas localidades dónde aún se puede ver la estación de ferrocarril de la antigua linea Segovia-Medina, tras el reciente desmantelamiento de la misma.