Domingo 3 de agosto 2008-08-04
Arranco el motor del coche. Es hora de regresar a Madrid. Al frente, un atardecer magnífico. Una paleta de naranjas, malvas y oro iluminan un cielo bañado de nubes de algodón. Atrás, un pueblo que todavía descansa del festejo del día anterior y que tardará en salir a disfrutar de un paseo debido al calor sofocante que a estas horas todavía persiste. Mientras circulo entre los campos de girasoles ya crecidos y bañados por esa luz especial que anuncia la noche, voy recordando los momentos inolvidables vividos en los dos últimos días y aún más, desde que surgió la idea en este foro de montar la exposición.
Tras la celebración de la misa y agazapada detrás de las persianas de la sala donde me encontraba, sintiendo cómo mil mariposas revoloteaban por mi estómago, observaba cómo iban aproximándose grupos de personas a la espera de que las puertas del Ayuntamiento se abrieran. Me entretuve encendiendo el aire acondicionado (que no se notó por la afluencia de gente) y preparando la música de fondo que habíamos seleccionado el día anterior: la banda sonora de la película “Chocolat” (que no se llegó a escuchar por lo mismo). Llegado el momento las puertas se abrieron dando paso a la representación oficial: Leo, Pedro, Julián, el diputado de Personal y deportes Santiago Vieco y la coordinadora del PSOE en Cuenca Isabel Rosas, seguidos de toda la gente de los pueblos que asistieron a la celebración. Creo que la palabras que definen lo que observé en las caras de la mayoría de los que por allí pasaron, fue Emoción y Sorpresa. Emoción ante algo que sucedía por primera vez en nuestro pueblo y Sorpresa porque el material expuesto era de calidad. La disposición de los cuadros y fotografías fue cuidada al detalle para que todos tuvieran el protagonismo que se merecían, presididos, eso sí, por el panel en el que se dispusieron las fotografías de nuestros antepasados, un pequeño homenaje a nuestro pasado que quería permaneciera en nuestro recuerdo. El rincón de nuestros poetas fue también muy admirado y he recibido ya peticiones de copias de las poesías allí expuestas. Todo fueron alabanzas y felicitaciones no sólo por la organización de la exposición, sino también a los autores de las obras.
Lo que yo sentí, va más allá del orgullo de haber podido llevar a cabo una idea, o de la satisfacción de haber trabajado en equipo con todos los que han colaborado en este proyecto. Me sentí y me siento FELIZ de haber podido colaborar para que todos disfrutaran de un momento de placer y de ENCUENTROS.
La fiesta cerró con la degustación de una paella, gazpacho y dulces. La paella pagada por el Ayuntamiento. El gazpacho y los dulces elaborados por las mujeres de los pueblos. Todos colaboraron. Este era el objetivo y se consiguió.
Mi más sincero agradecimiento a Leo por abrirnos las puertas del Ayuntamiento y dejarnos hacer, a Jordana, Julián, José Tubao, Eva (la nieta de el molinero), al pueblo de Bólliga que aportó fotografías, a nuestros poetas Antonio, Toñín, Juanito y Alejandro, a Manolo (hermano de Leo) que se esmeró en la parte técnica de la exposición, a todos quienes me han aportado las fotografías de sus familiares, a Pepe (marido de Leo) que hasta me llevó unas flores de alcachofa silvestres que sirvieron para preparar un centro de flores que presidió la entrada, a mi familia y por último, a mi querida amiga Marisa, una experta en el montaje de salas de exposición que se volcó tan generosamente. Y por supuesto a todos los que por allí pasaron.
FELICIDADES A TODOS.
Zoqueta
P. D.: Las fotos intentaré colgarlas esta semana.
La exposición se abrirá nuevamente el jueves, viernes y sábado (aprovechando las fiestas) de 19h a 20h.
Arranco el motor del coche. Es hora de regresar a Madrid. Al frente, un atardecer magnífico. Una paleta de naranjas, malvas y oro iluminan un cielo bañado de nubes de algodón. Atrás, un pueblo que todavía descansa del festejo del día anterior y que tardará en salir a disfrutar de un paseo debido al calor sofocante que a estas horas todavía persiste. Mientras circulo entre los campos de girasoles ya crecidos y bañados por esa luz especial que anuncia la noche, voy recordando los momentos inolvidables vividos en los dos últimos días y aún más, desde que surgió la idea en este foro de montar la exposición.
Tras la celebración de la misa y agazapada detrás de las persianas de la sala donde me encontraba, sintiendo cómo mil mariposas revoloteaban por mi estómago, observaba cómo iban aproximándose grupos de personas a la espera de que las puertas del Ayuntamiento se abrieran. Me entretuve encendiendo el aire acondicionado (que no se notó por la afluencia de gente) y preparando la música de fondo que habíamos seleccionado el día anterior: la banda sonora de la película “Chocolat” (que no se llegó a escuchar por lo mismo). Llegado el momento las puertas se abrieron dando paso a la representación oficial: Leo, Pedro, Julián, el diputado de Personal y deportes Santiago Vieco y la coordinadora del PSOE en Cuenca Isabel Rosas, seguidos de toda la gente de los pueblos que asistieron a la celebración. Creo que la palabras que definen lo que observé en las caras de la mayoría de los que por allí pasaron, fue Emoción y Sorpresa. Emoción ante algo que sucedía por primera vez en nuestro pueblo y Sorpresa porque el material expuesto era de calidad. La disposición de los cuadros y fotografías fue cuidada al detalle para que todos tuvieran el protagonismo que se merecían, presididos, eso sí, por el panel en el que se dispusieron las fotografías de nuestros antepasados, un pequeño homenaje a nuestro pasado que quería permaneciera en nuestro recuerdo. El rincón de nuestros poetas fue también muy admirado y he recibido ya peticiones de copias de las poesías allí expuestas. Todo fueron alabanzas y felicitaciones no sólo por la organización de la exposición, sino también a los autores de las obras.
Lo que yo sentí, va más allá del orgullo de haber podido llevar a cabo una idea, o de la satisfacción de haber trabajado en equipo con todos los que han colaborado en este proyecto. Me sentí y me siento FELIZ de haber podido colaborar para que todos disfrutaran de un momento de placer y de ENCUENTROS.
La fiesta cerró con la degustación de una paella, gazpacho y dulces. La paella pagada por el Ayuntamiento. El gazpacho y los dulces elaborados por las mujeres de los pueblos. Todos colaboraron. Este era el objetivo y se consiguió.
Mi más sincero agradecimiento a Leo por abrirnos las puertas del Ayuntamiento y dejarnos hacer, a Jordana, Julián, José Tubao, Eva (la nieta de el molinero), al pueblo de Bólliga que aportó fotografías, a nuestros poetas Antonio, Toñín, Juanito y Alejandro, a Manolo (hermano de Leo) que se esmeró en la parte técnica de la exposición, a todos quienes me han aportado las fotografías de sus familiares, a Pepe (marido de Leo) que hasta me llevó unas flores de alcachofa silvestres que sirvieron para preparar un centro de flores que presidió la entrada, a mi familia y por último, a mi querida amiga Marisa, una experta en el montaje de salas de exposición que se volcó tan generosamente. Y por supuesto a todos los que por allí pasaron.
FELICIDADES A TODOS.
Zoqueta
P. D.: Las fotos intentaré colgarlas esta semana.
La exposición se abrirá nuevamente el jueves, viernes y sábado (aprovechando las fiestas) de 19h a 20h.