ALCONCHEL DE LA ESTRELLA: Sentencias...

Sentencias

Son tres libros. El libro I va sobre materias de fe y los libros II y III sobre las virtudes teologales, la gracia y las virtudes en general. La obra parece creada en un primer momento para la formación del clero. Fue elaborada entre los años 612 y 615 en apogeo de su capacidad intelectual y pastoral.​

Sobre el ejercicio del poder de los príncipes:

Dios concedió a los príncipes la soberanía para el gobierno de los pueblos, quiso que ellos estuvieran al frente de quienes comparten su misma suerte de nacer y morir. Por tanto, el principado debe favorecer a los pueblos y no perjudicarlos; no oprimirlos con tiranía, sino velar por ellos, siendo condescendiente, a fin de que su distintivo del poder sea verdaderamente útil y empleen el don de Dios, para proteger a los miembros de Cristo.

S. Isidoro, Sententiae, 1.3C., 48-4933​

El poder temporal, sujeto a sus propias leyes y al poder espiritual:

LA CRISTIANDAD
1) Es justo que el príncipe esté sujeto a sus propias leyes. Pues solo cuando también él respete las leyes podrán creer que éstas serán guardadas por todos.
2) Los príncipes deben someterse a sus propias leyes y no podrán dejar de cumplir las leyes promulgadas para sus súbditos. Y es justa la queja de los que no toleran que se les permita algo que le esté prohibido al pueblo.
3) El poder secular está sujeto a las leyes eclesiásticas y los príncipes aunque posean el gobierno del reino están sometidos sin embargo al vínculo de la fe, de tal manera que están obligados a predicar la fe de cristo en sus leyes y a conservar esta predicación con sus buenas costumbres.

S. Isidoro: Sententiae III, 51.4