Hola Clarisa:
¿Qué tal?. Yo bien aquí en Madrid respirando aire contaminado.
Yo, también soy amante de la naturaleza, hasta el extremo que, como sabras soy de Fuentelespino y suelo pasar el verano en el pueblo. Haciendo senderismo entre Fuentelespino y Tresjuncos, por la ruta del monte, en compañía de un amigo zamorano y educado en Madrid, no conoce la vegetación de nuestra zona y no distinguía el tomillo tradicional con la morquera, le arranque un tomillo, para que lo oliera y comprobara la diferencia, con la morquera, y me hecho la bronca por arrancar una planta, yo me quede perplejo y pensando lo que había hecho y que tenia razón; te comento esto como anécdota, de cuanto se puede amar la naturaleza.
Un saludo y hasta la próxima, de un Nostálgico
¿Qué tal?. Yo bien aquí en Madrid respirando aire contaminado.
Yo, también soy amante de la naturaleza, hasta el extremo que, como sabras soy de Fuentelespino y suelo pasar el verano en el pueblo. Haciendo senderismo entre Fuentelespino y Tresjuncos, por la ruta del monte, en compañía de un amigo zamorano y educado en Madrid, no conoce la vegetación de nuestra zona y no distinguía el tomillo tradicional con la morquera, le arranque un tomillo, para que lo oliera y comprobara la diferencia, con la morquera, y me hecho la bronca por arrancar una planta, yo me quede perplejo y pensando lo que había hecho y que tenia razón; te comento esto como anécdota, de cuanto se puede amar la naturaleza.
Un saludo y hasta la próxima, de un Nostálgico
Simpre se puede aprender algo nuevo. A los que nos hemos criado en plena naturaleza y que, a veces, no le damos la importáncia que tiene por creer que es algo normal poder maltratarla, nos viene bien que alguien nos haga ver lo necesaria que es para nuestro futuro y el de nuestrosn hijos.
No nos pertenece, Dios nos la ha prstado con la condición de que la cuidemos y conservemos para las generaciones futuras. Una planta es como un milagro.
Ya me gustaria poder pasear por esos caminos que tu comentas. Algún dia espero poder volver por allí.
Un abrazo. Clarisa
No nos pertenece, Dios nos la ha prstado con la condición de que la cuidemos y conservemos para las generaciones futuras. Una planta es como un milagro.
Ya me gustaria poder pasear por esos caminos que tu comentas. Algún dia espero poder volver por allí.
Un abrazo. Clarisa