Sonam se llevó a los niños a su casa y los cuidó muy bien. Pero compró dos monos pequeños y les puso los nombres de los niños. Durante los días que siguieron, adiestró a los monos para que cuando él llamase ` ¡Tendxin, ven aquí!´, el mono mayor corriera hacia él, y que cuando llamase ` ¡Thupten, ven aquí!´, el mono más joven fuera hacia él. Los monos comprendieron muy bien y aprendieron muy rápido.