Comenzamos la procesión, ALCONCHEL DE LA ESTRELLA

(2015)
-Está hecha del mismo material que la mente humana. No hay ningún secreto... simplemente está hecha de deseos humanos.
Has ganado, pero antes de que te vayas, satisface mi curiosidad. ¿De qué está hecha tu escudilla?
El mendigo se rió y dijo:
-Estoy dispuesto a perder mi reino entero, pero este mendigo no debe derrotarme.
Diamantes, perlas, esmeraldas... los tesoros iban vaciando. La escudilla parecía no tener fondo. Todo lo que se colocaba en ella desaparecía inmediatamente. Era el atardecer y la gente estaba reunida en silencio. El rey se tiró a los pies del mendigo y admitió su derrota.
Le dijo:
-Llena de dinero la escudilla de este hombre.
El servidor lo hizo... y el dinero desapareció. Echó más y más y apenas lo echaba desaparecía. La escuadrilla del mendigo siempre estaba vacía.
Todo el palacio se reunió. El rumor se corrió por toda la ciudad y una gran multitud se reunió allí. El prestigio del emperador estaba en juego. Les dijo a sus servidores
-Es un deseo muy simple. ¿Ves aquella escudilla? ¿Puedes llenarla con algo?
Por supuesto -dijo el emperador.
Llamó a uno de sus servidores y le dijo: