Hola chicos.
Emigrao ya veo que has pasado de nuevo por aquí. Eso deseamos para Castilleja: una rápida recuperación.
Así que los cristales se te han quedado limpios como la Patena con esta lluvia caída por aquí, por Barcelona. Éso está muy bien pués así tendrás más tiempo de -hacer punto ja, ja, ja- si es que, encuentras las -abujas-, claro. Je, je.
Zafra yo no sé si apuraré mucho el plato o no, pero parece que me has leído el pensamiento y me has animado a comprarme los zapatos. ¡De color granate los compré esta mañana! Salí de casa con unos negros y volví con otros de color cambiado ja, ja, ja.
Suerte que eran granates que si llegan a ser del color del tractor, aquel que no era amarillo, no hubiese podido poner de qué color eran, por si acaso..
Lo de Pepe Blanco, -cantante-, era una broma pues se que murió hace años. Tambien sé que cantaba con Carmen Morell y era catalana y las canciones que más recuerdo, de las que cantaban, son: Cocidito Madrileño, ¡Ay, mi sombrero! y Me debes un beso.¡Mira, te escribo -un cacho-:
..No me digas éso que me vas a hacer llorar/
Es violenta pagar la cuenta/
Aunque me quede sin cenar/
Me debes un beso, no te lo perdono...
Ya les podía importar poco el quedarse sin cenar, ya. Si - a la fi y a la postre, como decimos por donde vivimos los tres- les estaba esperando ese Cocidito Madrileño que estaba repicando en la buhardilla y que sabía a hierbabuena y a verbena en Las Vistillas. Anda que, ¡no sabían poco ni ná!
¡Ah! Mi suegro a veces nos ha explicado que cuando él era muy jovencito había coincidido con Carmen Morell cantando en un coro del barrio donde vivía de pequeño. Allí hacía élla sus pinitos que la llevarían a la fama; mi suegro se quedó en los pinitos, y por éso estoy yo aquí escribiendo porque supongo que si él hubiese sido tambien cantante lo más seguro es que hoy no sería mi suegro y por lo tanto su hijo no me hubiese regalado este ordenador con el que escribo..¡Ay Dios mío, que ya me voy por los Cerros de úbeda! Que no tiene nada que ver la velocidad con el tocino, ni Carmen Morell con Alconchel ni con la foto del MAPA, y así claro, ahora van y lo borran..
Bueno chicos aquí os dejo, que me voy a poner mi sombrero, ése que tiene por gracia un tesoro; que aunque esta tarde no me vaya a los toros, me voy a dedicar a - hacer burla al tiempo- y no me lo voy a quitar hasta que no salga el sol. Un beso y hasta otro ratillo. Milagros.
Emigrao ya veo que has pasado de nuevo por aquí. Eso deseamos para Castilleja: una rápida recuperación.
Así que los cristales se te han quedado limpios como la Patena con esta lluvia caída por aquí, por Barcelona. Éso está muy bien pués así tendrás más tiempo de -hacer punto ja, ja, ja- si es que, encuentras las -abujas-, claro. Je, je.
Zafra yo no sé si apuraré mucho el plato o no, pero parece que me has leído el pensamiento y me has animado a comprarme los zapatos. ¡De color granate los compré esta mañana! Salí de casa con unos negros y volví con otros de color cambiado ja, ja, ja.
Suerte que eran granates que si llegan a ser del color del tractor, aquel que no era amarillo, no hubiese podido poner de qué color eran, por si acaso..
Lo de Pepe Blanco, -cantante-, era una broma pues se que murió hace años. Tambien sé que cantaba con Carmen Morell y era catalana y las canciones que más recuerdo, de las que cantaban, son: Cocidito Madrileño, ¡Ay, mi sombrero! y Me debes un beso.¡Mira, te escribo -un cacho-:
..No me digas éso que me vas a hacer llorar/
Es violenta pagar la cuenta/
Aunque me quede sin cenar/
Me debes un beso, no te lo perdono...
Ya les podía importar poco el quedarse sin cenar, ya. Si - a la fi y a la postre, como decimos por donde vivimos los tres- les estaba esperando ese Cocidito Madrileño que estaba repicando en la buhardilla y que sabía a hierbabuena y a verbena en Las Vistillas. Anda que, ¡no sabían poco ni ná!
¡Ah! Mi suegro a veces nos ha explicado que cuando él era muy jovencito había coincidido con Carmen Morell cantando en un coro del barrio donde vivía de pequeño. Allí hacía élla sus pinitos que la llevarían a la fama; mi suegro se quedó en los pinitos, y por éso estoy yo aquí escribiendo porque supongo que si él hubiese sido tambien cantante lo más seguro es que hoy no sería mi suegro y por lo tanto su hijo no me hubiese regalado este ordenador con el que escribo..¡Ay Dios mío, que ya me voy por los Cerros de úbeda! Que no tiene nada que ver la velocidad con el tocino, ni Carmen Morell con Alconchel ni con la foto del MAPA, y así claro, ahora van y lo borran..
Bueno chicos aquí os dejo, que me voy a poner mi sombrero, ése que tiene por gracia un tesoro; que aunque esta tarde no me vaya a los toros, me voy a dedicar a - hacer burla al tiempo- y no me lo voy a quitar hasta que no salga el sol. Un beso y hasta otro ratillo. Milagros.