Oyendo las explicaciones del arqueólogo, ALCONCHEL DE LA ESTRELLA

Al tiempo que escuchamos las explicaciones de los arqueólogos, sobre las diferentes culturas asentadas en el Cerro de la Virgen, podemos disfrutar de un día espléndido y de unas vistas inigualables.

UNA GRAN OPPIDUM

Esto ha permitido averiguar, por ejemplo, que la ciudad de época ibérica fue mucho más grande que la romana, abarcando unas 5 hectáreas de superficie, “aunque también hay mucho material extramuros, con zonas de necrópolis, donde los habitantes eran quemados y se enterraban dentro de unas urnas”, detalla el arqueólogo.

La intención de la Asociación es continuar esta importante labor de excavación, estudio e investigación, y para ello ya están viendo a qué ayudas regionales o provinciales pueden acogerse. Con estas subvenciones, se podrían delimitar este 2018 dos zonas donde todo apunta a que hay estructuras completas y seguir interviniendo en la muralla “lo que nos va a dar mucha información sobre los sistemas defensivos”.

Tomás Aguado subraya la relevancia cultural del yacimiento, sobre todo en lo relativo a los íberos. Según todos los hallazgos, la del Cerro de la Virgen de la Cuesta fue una oppidum (ciudad) que tuvo que controlar un amplio territorio alrededor, una especie de capital de comarca.

“La puesta en valor de este yacimiento supone un avance muy grande en el conocimiento de cómo fue la Edad del Hierro no solo en la provincia, sino en toda la región, y cómo fue la transición al mundo romano”, indica.
(20 de Enero de 2018)
Sus principales atributos son: una corona de rosas, en alusión a su nombre; y un crucifijo y una calavera, por su ascesis.
Se le invoca como abogada contra la peste y los terremotos. La iconografía la presenta como ermitaña o bien revestida con hábito agustino.
Sus restos fueron descubiertos un 15 de julio y el Papa Urbano VIII la incluyó como santa en el Martirologio.
En la Edad Media se le dedicaron varias iglesias y se le consideró Protectora y Patrona de Palermo.
Aunque se desconocen datos sobre su patria y vida, una leyenda asegura que a los 14 años se retiró a una cueva del monte Coscina y luego a otra del monte Pellegrino, cercano a Palermo.