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ALCONCHEL DE LA ESTRELLA (Cuenca)

Fotografía que solían hacernos en la escuela
Foto enviada por eufra7dos@hotmail.com

Hoy vamos con un insulto que comienza con E. Se trata de ECHACANTOS. Según P. Celdrán es un "sujeto vil y despreciable; persona miserable y ruín; donnadie con ribetes de loco.
Quevedo la hace sinónimo de "tirapiedras": persona que no pinta nada en la vida, a quien hoy llamaríamos "mierdecilla".
Miro los insultos que comienzan con la letra F y encuentro el primero, que es, FACINEROSO.

Sujeto malvado, lleno de delitos, desbocado, disoluto; delincuente que anda fuera de control, al que la Justicia se muestra incapaz de echar el guante. Es término derivado culto de la voz latina facinus = hazaña criminal, y voz ofensiva en castellano desde finales del siglo XV. Lope de Vega, en su Corona trágica, hace este uso del vocablo:

El pecho del traidor facineroso
resplandeciente peto guarnecía:
que así se suele armar la cobardía.

Coetáneamente, Covarrubias, (1611) bajo la voz "facinoroso", dice lo siguiente en su Tesoro de la Lengua: Facinoroso. Hombre que en la república ha cometido grandes delitos y tiene inclinación a continuarlos. Estos, o son hombres tan poderosos que nadie les osa ir a la mano, o son favorecidos de los tales, y debaxo de su sombra matan y roban y nadie se osa quexar dellos; ni la justicia procede de oficio, porque no siendo el delito público y que lo asgan con el hurto en las manos, no ay quien ose testificar contra él... ... (ver texto completo)
Descarado es el segundo insulto que comienza con la letra D en El Libro de los Insultos de Celdrán. Lo define así.

Sujeto que habla u obra con desvergüenza y frescura, sin pudor ni respeto, y de manera muy descortés. En el Tesoro de la Lengua, (1611) Covarrubias emplea el término en el sentido que hemos apuntado: El atrevido que sin empacho y a la cara habla mal de alguien. El poco conocido, pero gran escritor de mediados del siglo XVII, fray Damián Cornejo, escribe: "Púsose como una víbora, y ... (ver texto completo)
Hoy vamos con un insulto que comienza con E. Se trata de ECHACANTOS. Según P. Celdrán es un "sujeto vil y despreciable; persona miserable y ruín; donnadie con ribetes de loco.
Quevedo la hace sinónimo de "tirapiedras": persona que no pinta nada en la vida, a quien hoy llamaríamos "mierdecilla".
En el Libro de los Insultos, Cabestro es el primero que he podido encontrar por orden alfabético en la letra C. Según Celdrán, cabestro es:

Cornudo, cabrón consentido a quien su mujer gobierna y manda. Es uso metonímico de la acepción principal: "ramal o soga de cáñamo con que se ata a la bestia para reducirla y controlar su movimiento".
Es insulto muy corriente en los siglos de oro, que utiliza Quevedo en letrillas satíricas como ésta:

Tendrá la del maridillo,
si en disimular es diestro,
el ... (ver texto completo)
Descarado es el segundo insulto que comienza con la letra D en El Libro de los Insultos de Celdrán. Lo define así.

Sujeto que habla u obra con desvergüenza y frescura, sin pudor ni respeto, y de manera muy descortés. En el Tesoro de la Lengua, (1611) Covarrubias emplea el término en el sentido que hemos apuntado: El atrevido que sin empacho y a la cara habla mal de alguien. El poco conocido, pero gran escritor de mediados del siglo XVII, fray Damián Cornejo, escribe: "Púsose como una víbora, y a muy altas voces empezó a maltratarla llamándole embusterilla descarada".
Hoy se tiende a emplear la perífrasis "tener descaro, mostrar descaro", y cuando se usa el adjetivo se hace apeando la "d" propia del participio: "descara (d) o". ... (ver texto completo)
Aunque parezca mentira, de haberlos, haílos.
Los insultos de hoy son BABOSO Y BABOSÓN.

Se dice del individuo pegajoso y pesado, que llega a ser sumamente molesto, al adherirse a la vida de uno como la lapa. También se aplica a quien es lujurioso y rastrero, en el sentido de que se le cae la baba, babea ostensiblemente ante el objeto de sus viles y bajos deseos. El baboso es individuo enamoradizo, que se presta a cualquier cosa con tal de realizar la desatinada pasión que, por sus limitaciones, ... (ver texto completo)
En el Libro de los Insultos, Cabestro es el primero que he podido encontrar por orden alfabético en la letra C. Según Celdrán, cabestro es:

Cornudo, cabrón consentido a quien su mujer gobierna y manda. Es uso metonímico de la acepción principal: "ramal o soga de cáñamo con que se ata a la bestia para reducirla y controlar su movimiento".
Es insulto muy corriente en los siglos de oro, que utiliza Quevedo en letrillas satíricas como ésta:

Tendrá la del maridillo,
si en disimular es diestro,
el marido por cabestro
y el galán por cabestrillo." ... (ver texto completo)
Aunque parezca mentira, de haberlos, haílos.
Los insultos de hoy son BABOSO Y BABOSÓN.

Se dice del individuo pegajoso y pesado, que llega a ser sumamente molesto, al adherirse a la vida de uno como la lapa. También se aplica a quien es lujurioso y rastrero, en el sentido de que se le cae la baba, babea ostensiblemente ante el objeto de sus viles y bajos deseos. El baboso es individuo enamoradizo, que se presta a cualquier cosa con tal de realizar la desatinada pasión que, por sus limitaciones, no es previsible que consiga, ya que aquello a lo que aspira está mucho más allá de sus posibilidades reales. Manuel Bretón, autor dramático del pasado siglo, inscribe el término en el siguiente contexto:

Señora, me canso
de andar hecho un azacán
galanteando baboso
a mozuelas en agraz...
También se dice del adolescente que presume como persona adulta. ... (ver texto completo)
ZAFIO.
Este insulto sí que es fácil escucharlo de vez en cuando ¡Hay tanto Zafio suelto por ahí que...!

"Hombre tosco, grosero, inculto e ignorante. Es voz insultante de etimología árabe, surgida de un cruce o confusión entre los términos safih = ignorante, bellaco, y safi = simple. Covarrubias, en su Tesoro de la Lengua, (1611) atribuyó origenes diversos al término: del hebreo safáh = labio, lengua, discurso, porque el zafio sólo habla su jerga o dialecto local; o del griego zafeles = rústico, ... (ver texto completo)
Este insulto, ni sabía que existía... ¡No lo he oído en mi vida! Otra cosa más que he aprendido hoy...

"Ambladora.

Ramera; mujer que mueve lúbricamente el cuerpo para llamar la atención de los hombres; mujer que contonea su cuerpo, haciendo al andar movimientos afectados con hombros y caderas. El verbo y sentido del que deriva el término lo ilustran en cierta Canción a una mujer que traía grandes caderas,
Antón de Montoro, (mediados del siglo XV):
"Gentil dama singular, (...)
mesuráos en vuestro amblar,
que por mucho madrugar
no amanece más aína.
Las nalgas baxas, terreras,
mecedlas por lindo modo,
poco a poco, y no del todo
el traer de las caderas;
y al tiempo del desgranar
que el hombre se desatina,
mesuráos en vuestro amblar
que por mucho madrugar..."
El verbo en cuestión pasó a denotar el meneo peculiar que toma el cuerpo al hacer el amor, tornándose por ello en voz obscena, apartada del uso decente; y ambladora se convirtió en sinónimo de "jodedora", puta, mujer cualquiera." " ... (ver texto completo)
Hoy vamos con el insulto Alfeñique y "Melindres". Ámbos los he escuchado en Alconchel; Alfeñique, concretamente, en boca de mi abuela paterna, Castora.

"Persona quejumbrosa, delicada de cuerpo y de ánimo apocado, remilgado y redicho, que busca paliar lo menguado de su aspecto con lo atildado de su apariencia. (Véase también "melindres"). Gaspar Melchor de Jovellanos, (finales del siglo XVIII) entiende así el término: " ¿Será más digno de tu gracia, Arnesto, un alfeñique perfumado y lindo, de noble ... (ver texto completo)
ZAFIO.
Este insulto sí que es fácil escucharlo de vez en cuando ¡Hay tanto Zafio suelto por ahí que...!

"Hombre tosco, grosero, inculto e ignorante. Es voz insultante de etimología árabe, surgida de un cruce o confusión entre los términos safih = ignorante, bellaco, y safi = simple. Covarrubias, en su Tesoro de la Lengua, (1611) atribuyó origenes diversos al término: del hebreo safáh = labio, lengua, discurso, porque el zafio sólo habla su jerga o dialecto local; o del griego zafeles = rústico, simple. Pero aunque las etimologías andan equivocadas, no así el sentido. Cervantes utiliza de forma muy actual el término en el Quijote: "Y yo la vi en la fealdad y bajeza de una zafia". Como también su coetáneo Tirso de Molina:
-Mas yo debo ser zafio, un...
- ¡Empieza ya...
-Un pollino, una mula de alquiler...

El Diccionario de Autoridades, (primeros decenios del siglo XVIII), recoge su sentido definitivo: tosco, inculto, ignorante y falto de doctrina. Su empleo en castellano es tardío, si se tiene en cuenta el origen arábigo del término. Lo emplean autores teatrales, como Juan del Encina (siglo XV): "Eres un zafio", dice un personaje a otro, en escena; también Antonio de Nebrija: "çafio en lenguas" llama al villano que no sabe hablar otro idioma que el de su terruño, y es además "descortés y mal mirado"." ... (ver texto completo)
Hoy vamos con el insulto Alfeñique y "Melindres". Ámbos los he escuchado en Alconchel; Alfeñique, concretamente, en boca de mi abuela paterna, Castora.

"Persona quejumbrosa, delicada de cuerpo y de ánimo apocado, remilgado y redicho, que busca paliar lo menguado de su aspecto con lo atildado de su apariencia. (Véase también "melindres"). Gaspar Melchor de Jovellanos, (finales del siglo XVIII) entiende así el término: " ¿Será más digno de tu gracia, Arnesto, un alfeñique perfumado y lindo, de noble traje y ruines pensamientos...?".
Se emplea en sentido figurado, teniendo presente el significado o acepción principal, que es el de "pasta de azúcar cocida y estirada en barras retorcidas". En cuanto a su etimología, procede del árabe fanid = dulce de azúcar, golosina que solía darse a los niños enclenques o enfermizos, de salud precaria según Covarrubias en su Tesoro de la Lengua (1611), quien amparándose en Diego de Urrea asegura que "al que es muy delicado dezimos comúnmente ser hecho de alfeñique". Hoy apenas tiene uso, pero se sigue escuchando en ámbitos familiares, con ánimo más caritativo y compasivo que insultante." ... (ver texto completo)
ALCORNOQUE, como insulto, sí lo he oído decir a alguien más de una vez. Según el libro de Celdrán, Alcornoque es:

"Individuo bruto y desmañado; sujeto zafio, de gran tosquedad y rudeza. El poeta romántico Ventura de la Vega, (mediados del XIX), utiliza el vocablo en su acepción insultante: " ¡Hombre, Zapata es un alcornoque...!". La acepción peyorativa de "alcornoque" en su sentido figurado estaba presente en el nombre mismo del árbol, puesto que el sufijo latino "-occus" alude a la tosquedad ... (ver texto completo)
Algo más sobre el ALCORNOQUE.

"Nombre Común: Alcornoque
Nombre Cientifico: Quercus suber
Familia: Fagáceas
Clase: Angiospermas dicotiledóneas.
Protección CLM: Ley Protección Cubiertas Vegetales Naturales.

Descripción:
... (ver texto completo)
Cuando queramos insultar a alguien con la palabra Zorrocloco, hemos de saber que "es un sujeto abobado, que parece tonto, pero que sin embargo está atento a lo que le conviene y presta atención a su utilidad. Utiliza el término Francisco de Quevedo en su Cuento de cuentos, primer cuarto del siglo XVII. Es compuesto de "clueco" = enfermizo, y "zorro" = sujeto astuto. El zorrocloco es un listo que se hace el bobo para mejor engañar a quien se las da de listo no siéndolo tanto...
Hablando de Quevedo, os pongo un pequeño retazo de uno de sus escritos.

DONDE SE LEEN JUNTAS...

"Donde se leen juntas las vulgaridades rústicas, que aún duran en nuestra habla, barridas de la conversación.

A Don Alonso Messía de Leyva

La habla que llamamos castellana, y romance, tiene por dueños todas las naciones, los árabes, los hebreos, los griegos. Los romanos naturalizaron con la victoria tantas voces en nuestro idioma, que le sucede lo que a la capa del pobre, que son tantos los ... (ver texto completo)
Babieca, no, pero estar en Babia, mentalmente me lo he dicho yo misma muchas veces, pero sin saber que ESTAR EN BABIA ya se decía hace siglos.

"Algunos quieren que el origen de la expresión sea italiano, en cuya lengua el
término expresivo bobbia tiene que ver con el hecho de comer la sopa boba, situación de marginación y desamparo. No parece que sea así, ya que fue insulto empleado por Gonzalo de Berceo (principios siglo XIII), en su Vida de San Millán, donde pone en boca del diablo las siguientes ... (ver texto completo)
Cuando queramos insultar a alguien con la palabra Zorrocloco, hemos de saber que "es un sujeto abobado, que parece tonto, pero que sin embargo está atento a lo que le conviene y presta atención a su utilidad. Utiliza el término Francisco de Quevedo en su Cuento de cuentos, primer cuarto del siglo XVII. Es compuesto de "clueco" = enfermizo, y "zorro" = sujeto astuto. El zorrocloco es un listo que se hace el bobo para mejor engañar a quien se las da de listo no siéndolo tanto...
ALCORNOQUE, como insulto, sí lo he oído decir a alguien más de una vez. Según el libro de Celdrán, Alcornoque es:

"Individuo bruto y desmañado; sujeto zafio, de gran tosquedad y rudeza. El poeta romántico Ventura de la Vega, (mediados del XIX), utiliza el vocablo en su acepción insultante: " ¡Hombre, Zapata es un alcornoque...!". La acepción peyorativa de "alcornoque" en su sentido figurado estaba presente en el nombre mismo del árbol, puesto que el sufijo latino "-occus" alude a la tosquedad ... (ver texto completo)
Babieca, no, pero estar en Babia, mentalmente me lo he dicho yo misma muchas veces, pero sin saber que ESTAR EN BABIA ya se decía hace siglos.

"Algunos quieren que el origen de la expresión sea italiano, en cuya lengua el
término expresivo bobbia tiene que ver con el hecho de comer la sopa boba, situación de marginación y desamparo. No parece que sea así, ya que fue insulto empleado por Gonzalo de Berceo (principios siglo XIII), en su Vida de San Millán, donde pone en boca del diablo las siguientes ... (ver texto completo)
Algunas veces había oído el insulto Desastroso, y Desastre, pero este de ASTROSO no lo había oído nunca. Según recoge el libro de Celdrán, una perona astrosa es:

"Sujeto vil y despreciable, capaz de llevar a cabo bajezas y traiciones; también, persona desaseada, desastrada y sucia. En ambos sentidos empleó ya el término el autor del Libro de Apolonio, (siglo XIII):

Por amor el astroso de sallir de laçerio
madurgó de manyana e fue poral çiminterio;
aguzó su cochiello por fer mal ministerio,
por ... (ver texto completo)
ALCORNOQUE, como insulto, sí lo he oído decir a alguien más de una vez. Según el libro de Celdrán, Alcornoque es:

"Individuo bruto y desmañado; sujeto zafio, de gran tosquedad y rudeza. El poeta romántico Ventura de la Vega, (mediados del XIX), utiliza el vocablo en su acepción insultante: " ¡Hombre, Zapata es un alcornoque...!". La acepción peyorativa de "alcornoque" en su sentido figurado estaba presente en el nombre mismo del árbol, puesto que el sufijo latino "-occus" alude a la tosquedad ... (ver texto completo)
Algún que otro AGUAFIESTAS, he visto yo por ahí... ¡Jolín!, ¡Y cómo joden la marrana! (expresión alconchelera) Según el libro de Celdrán, un Aguafiestas es:
"Sujeto que perturba cualquier diversión; malasombra que incomoda y molesta; metepatas que impide que otros disfruten de la fiesta, cayendo como un jarro de agua fría sobre las ganas de regocijo de los demás. Es término compuesto, en el que el verbo soporta la base del significado, ya que aguar equivale a frustrar, turbar o interrumpir una ocasión ... (ver texto completo)
Algunas veces había oído el insulto Desastroso, y Desastre, pero este de ASTROSO no lo había oído nunca. Según recoge el libro de Celdrán, una perona astrosa es:

"Sujeto vil y despreciable, capaz de llevar a cabo bajezas y traiciones; también, persona desaseada, desastrada y sucia. En ambos sentidos empleó ya el término el autor del Libro de Apolonio, (siglo XIII):

Por amor el astroso de sallir de laçerio
madurgó de manyana e fue poral çiminterio;
aguzó su cochiello por fer mal ministerio,
por matarla rezando los salmos del salterio.

Se dijo también del mezquino, desgraciado y miserable, sentido que da al vocablo Sem Tob de Carrión en sus Proverbios Morales, (mediados siglo XIV):

Quando las tus cobdiçias
ganas por ser mintroso,
por muy sabio te priçias,
e tyenes por astroso
al que non quier engaño...

En la acepción de persona desastrada, desaliñada, que descuida su aspecto importándole poco la imagen que proyecta, utiliza el término Cervantes: "Dice la historia que era grandísima la atención con que don Quijote escuchaba al astroso caballero de la Sierra...".
Covarrubias, en su Tesoro de la Lengua (1611), añade una tercera acepción, la de persona sin ventura:... aquel en cuyo nacimiento concurrieron muchas estrellas en su favor para subir a gran estado, muere desdichado. Y desastrado, al que no tiene ningún astro que le favoreciese y vive toda su vida miserable, abatido, y sin que nadie en vida ni en muerte haga caso dél.
Es su acepción más antigua, uso que da a este vocablo Gonzalo de Berceo. De esa acepción tomó su significado el término "desastre": infelicidad, descalabro y desorden. San Isidoro de Sevilla, (libro X de sus Etimologías, siglo VII) dice que astrosus es aquel que ha nacido bajo una mala estrella: malo sidere natus." ... (ver texto completo)
No muchos, pero a algún Zorronglón que otro he visto yo alguna vez. ¿Y vosotros?
" ZORRONGLÓN.
Que hace de mala gana, con lentitud exagerada, y de mala manera las cosas que se le mandan, murmurando, refunfuñando y mostrando repugnancia. Es metátesis de rezonglón, derivado de rezongar, que es lo que este individuo hace de continuo para mostrar su desacuerdo y mala disposición a obedecer y a cumplir con su deber."
Algún que otro AGUAFIESTAS, he visto yo por ahí... ¡Jolín!, ¡Y cómo joden la marrana! (expresión alconchelera) Según el libro de Celdrán, un Aguafiestas es:
"Sujeto que perturba cualquier diversión; malasombra que incomoda y molesta; metepatas que impide que otros disfruten de la fiesta, cayendo como un jarro de agua fría sobre las ganas de regocijo de los demás. Es término compuesto, en el que el verbo soporta la base del significado, ya que aguar equivale a frustrar, turbar o interrumpir una ocasión ... (ver texto completo)