Bueno Noemí, creo que te dejo por esta noche, la verdad es que el sueño aun no se ha manifestado, pero la cama me está llamando y yo soy muy obediente je. je…hasta mañana….. besos…
Ya es tarde para tì y yo tengo que cocinar; dentro de un rato Nadia me reclamarà los ñoquis que le encantan. ¡Hasta mañana y besos!
Me hizo gracia los de los ñoquis y me fui al buscador de Google, ya vi que es algo engorroso el hacerlo y que hay una cierta tradición de comerlos todos los 29 de cada mes….
Igualmente indague el porque de esa costumbre y ya vi una de las historias que se cuentan incluida la San Pantaleón…
Igualmente indague el porque de esa costumbre y ya vi una de las historias que se cuentan incluida la San Pantaleón…
¡Salieron riquísimos los ñoquis de ricota con una salsa liviana natural (no frita)!
Los compro en una casa de pastas que es excelente. No siempre los cocino los días 29, pero como hacía tiempo que no comíamos, aprovechamos la ocasión... Los de papa, son más pesados y aportan más calorías. Desconozco la historia de San Pantaleón con respecto a los ñoquis. ¿Me la cuentas? En España no se comen?
Los compro en una casa de pastas que es excelente. No siempre los cocino los días 29, pero como hacía tiempo que no comíamos, aprovechamos la ocasión... Los de papa, son más pesados y aportan más calorías. Desconozco la historia de San Pantaleón con respecto a los ñoquis. ¿Me la cuentas? En España no se comen?
Por supuesto que nada me cuesta contarte la historia, claro que según lo que yo he encontrado buscando por la red…
“La tradición de servir ñoquis los días 29 nace de una leyenda que se remonta al siglo VIII. Vivía entonces en Nicosia (Asia Mayor) un joven médico llamado Pantaleón, quien, tras convertirse al cristianismo, peregrinó por el norte de Italia. Allí practicó milagrosas curaciones por las que fue canonizado. Cierta ocasión en que pidió pan a unos campesinos vénetos, éstos lo invitaron a compartir su pobre mesa. Agradecido, les anunció un año de pesca y cosechas excelentes. La profecía se cumplió y otros muchos milagros. San Pantaleón fue consagrado -a la par de San Marcos- patrono de Venecia. Aquel episodio ocurrió un 29 de julio, por tal razón se recuerda ese día con una comida sencilla representada por los ñoquis. El ritual que lo acompaña de poner dinero bajo el plato simboliza el deseo de nuevas dádivas. Es costumbre dejar un billete debajo del plato para (por un pensamiento de “magia contagiosa”) poder atraer de esta forma suerte y prosperidad al comensal”.
“La tradición de servir ñoquis los días 29 nace de una leyenda que se remonta al siglo VIII. Vivía entonces en Nicosia (Asia Mayor) un joven médico llamado Pantaleón, quien, tras convertirse al cristianismo, peregrinó por el norte de Italia. Allí practicó milagrosas curaciones por las que fue canonizado. Cierta ocasión en que pidió pan a unos campesinos vénetos, éstos lo invitaron a compartir su pobre mesa. Agradecido, les anunció un año de pesca y cosechas excelentes. La profecía se cumplió y otros muchos milagros. San Pantaleón fue consagrado -a la par de San Marcos- patrono de Venecia. Aquel episodio ocurrió un 29 de julio, por tal razón se recuerda ese día con una comida sencilla representada por los ñoquis. El ritual que lo acompaña de poner dinero bajo el plato simboliza el deseo de nuevas dádivas. Es costumbre dejar un billete debajo del plato para (por un pensamiento de “magia contagiosa”) poder atraer de esta forma suerte y prosperidad al comensal”.
