yo llevo muchos años viviendo en Zaragoza pero trabajé en UNOSA primero de rampero y despues de picador, asi que creo conocer todas las visicitudes de la mineria pues soy de esos que se dice de la posguerra, estoy con todos los mineros ojalá se arreglen las cosas parabien de todos. Como anédocta y recuerdos diré que cuando yo era un guaje salia mi padre del pozo San Jorge de Caborana de donde soy nacido y est, abamos esperando a ver si se habia dejado algo del bocadillo que se habia llevado para
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¡Qué buena memoria tienes anónimo!. A muchos que "han perdido la memoria" o pueden no tener recuerdos por la edad, les parecerá imposible, pero eso que cuentas es tan cierto, como que los hijos de los mineros de hoy no son los hijos de los mineros de ayer. No viví de la minería, pero sí a consta de la minería. Yo, que también soy de posguerra, recuerdo, (ya sabes como eran en nuestra época los entierros) ir a entierros de niños, y en voz muy baja, decía mi abuela: "éste pobre niño se ha muerto de hambre". Era cierto, todos lo pasamos mal pero muchos peor. Tuve un compañero, que contaba lo mismo que tú acabas de contar. Esperaba a su padre porque siempre le dejaba un poquito de su bocadillo de tortilla... Pero ¡que va!, para muchos eso no existió nunca. Lo más sangrante, es que haya gente siente vergüenza por haber pasado hambre; como si ellos hubiesen sido los culpables. En las huelgas de 62, eso está más reciente, muchos niños salían de sus casas y se iban a comer a casas de familias que se prestaban para alimentarles.
Pocos serán los que no debemos poco o mucho a la minería, y si es cierto que paises ricos como Alemania se replantean volver a la explotación de minas. ¡Luchemos todos por los mineros!. ¡SUERTE PARA LA MARCHA NEGRA!. Será suerte para todos los asturianos.
También deseo suerte para la Educación públiblica, por defenderla murió mucha gente. Si nosotros ya no podemos dar más de si, vendrán hijos y los hijos de nuestros hijos. Felicitar al profesor de Valencia que nos dejó tan bonita carta. ¡Pena de tanto ladrón suelto por doquier.
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