No puedo irme sin abrir antes el campo de fútbol de Turón para todos estos jugadores que durante un tiempo atrás alegraron a la aficción turonesa y a todos los pueblos de los alrededores. Sobre todo me acuerdo de los quioscos de la Felguera, a la entrada del campo, tenía que hacer cola para comprarme unas banderillas, todo gracias al fútbol.