Es
pueblo precioso y muy acogedor, tiene unos
paisajes maravillosos y su gente es muy servicial, agradable campechana y acogedora. He coincidido en
fiestas de
verano y son muy divertidas y familiares. Creo que la dipuatcion de
Aragon debería de pensar en este tipo de pueblecitos y promocionar el turismo rural de estos lugares con
casas rurales, escursiones...