Pobre papa.
Recuerdo una anecdota de cuando fue a africa, y al ver a tantos niños tan canijitos, le pregunto a su consejero que que le pasaba a esos niños, y le dijo su consejero que no comian, y el tan noble le tiro de la orejita al niño y le dijo:niño que hay que
comer mas.
A ver si entra un papa que lo done todo a los que lo necesitan de verdad, como hacemos nosotros, que somos nuestros propios papas, y seguro tenemos mucho mas corazon.
Ayuda sin mirar intereses y seras recompensado.