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JIMENA: ¡Que empezó con chiriviri, luego una buena zamanza!...

Jesús de la Rosa Luque nace un cinco de marzo de 1948, dicho así no todos sabrían que me estoy refiriendo al alma mater del grupo de rock andaluz TRIANA. Hoy cumpliría 64 años, el que fuera líder natural del grupo que durante la década de los setenta y ochenta del pasado siglo revoluciono la música de nuestro país.
TRIANA regresaba, en diferentes vehículos, de dar un concierto benéfico, tras las inundaciones sufridas en el País Vasco, junto a otros prestigiosos músicos españoles, en el velódromo de Anoeta, en San Sebastián.
Terminada la actuación los músicos volvían hacia Madrid, a sus casas respectivas de Villaviciosa de Odón. Aquella era la última gala de la gira del grupo por ese año. Todo había ido bien, a pedir de boca. Su música del sur había vuelto a prender la chispa del éxito en aquel norte diferente. De nuevo la magia de TRIANA había repartido a diestro y siniestro sus fragancias y elixires irresistibles. Pero ahora, al final de la parafernalia rockera, terminada ya la faena, la música y las canciones se habían quedado encerradas en Anoeta como soñando sonar por los días de los días en un futuro vacío y colmado de nostalgias, de recuerdos de pasados tiempos… Ahora en la carretera sólo había silencio y un agudo silbar del viento que se dejaba oír por la rendija de la ventanilla entreabierta. Ni un solo acorde susurraba el rumor de las coplas eléctricas anteriores; ni la sensibilidad de un verso se allegaba… Sólo silencio. Sólo un vacío delator de la inmediata tragedia que iba a producirse colmaba el ambiente…
Parece ser que fue a eso de las seis de tarde del fatídico día 13 de octubre de 1983. La Guardia Civil de la Comandancia de Burgos aún guardaba hasta no hace mucho tiempo el atestado del accidente, tal vez todavía lo conserva.
El Citroen BX del líder de TRIANA chocaba de frente, pocos kilómetros antes de llegar a Burgos, con una furgoneta de Santander con la que en mala hora fue a cruzarse en su camino.
Jesús de la Rosa Luque fue trasladado al Hospital General Yagüe de la Seguridad Social, en la capital burgalesa, en el que quedó ingresado. Al poco tiempo es enviado a la Unidad de Vigilancia Intensiva con pronóstico muy grave pese a haber entrado en la clínica por su propio pie. Se le interviene quirúrgicamente a las seis horas, aproximadamente, de su ingreso, y surgen complicaciones. La tráquea del músico había quedado muy dañada en el accidente a causa del cinturón de seguridad de su vehículo, y en el momento de la intervención, lamentablemente, termina de romperse sin remedio. Jesús deja de vivir en un quirófano de aquel hospital la madrugada del 14 de octubre de 1983, viernes. Fecha triste e inolvidable ya para la historia de la música en España. La música de TRIANA permanece. Pasan los años y ahí sigue, como el primer día a los acordes de “El Patio”, reedición tras reedición discográfica hasta los de “Llegó el día”. Actual y presente. Pasado y futuro de una música de Andalucía. Está en el corazón de muchos. En el gusto de casi todos… Pareciera a todas luces que TRIANA es inmortal…
Te agradecemos, Jesús de la Rosa Luque, el regalo de tus canciones. Siempre las escuchamos, siempre las escucharemos. Son ya veintiocho años sin ti, pero aún te echamos de menos aunque tu música, nos reconforte en las distancias......

saludos y buenos dias

Gran músico, ¿Tu estabas el día 2 de Septiembre del 1978 en Jodar el día del concierto de Triana)
saludos

Allí estube yo, que buena memoria tienes para las fechas; Como sabes yo era un habitual de las ferias de la zona. Recuerdo una ves que en Jodar fuimos a ver a Jose Velez, llegamos pronto y cogimos el mejor sitio, al lado del escenario, cuando salio el susodicho Jose Velez y empezo a cantar hizo un corro que no veas, se quedo solo en el metro y medio de su alrededor, como espurreaba el joio, ni con paraguas se podía estar allí, desde entonces dejó de gustarme el vino griego.
saludos. Se os ve muy bien en las fotos.

¡Que empezó con chiriviri, luego una buena zamanza!
Aunque soy más cervecero, pero reconozco que donde se ponga un buen ribera, con un buen queso y unos buenos tacos de ese de bellota y de vez en cuando una fritanga de chivito y en buena compañía, no se puede pedir nada más.
saludos