... gracias Pachuelo por tenerme, entiéndo, tanta estima, según leo en tu correo de ayer. Como diria mi padre:"no te rias de la infelicidad hómbre". Un abrazo, fuerte, para qué lo compartas con tu encantadora madre. La mia se entretuvo ayer en hacerme una cuajadera de habas con tomate con sus correspondientes pimiéntos verdes y secos; para acompañarlas, un Ribera del Duero de la Bodega Emilio Moro, gentileza de mi cuñao Luis; no estuvo mál la cosa. Saludos. Lope Viedma.
ay! que no daría yo por poder comerme un platillo de esas habitas con tomate, por aquí ni se conocen, solo las verdes y en conserva.
P. D. del vino no me da tanta envidia.
Un saludo.
P. D. del vino no me da tanta envidia.
Un saludo.
Hola prima, me alegra que tu computadora ya esté en sus "cabales"; se te extraña muchísimo en estas tertulias virtuales. Por Caracas todos están bien, la familia creciendo: Brahiana (hija de More), tuvo una beba a finales de octubre y Yangzet (hija de Paky), da a luz, con el favor de Dios, en marzo; continua la genética multiplicándose por estos lares caribeños. Pienso escribirte a tu correo, entre hoy o mañana. Un abrazo
¡Ah!, se me olvidó comentarte sobre las habas secas: por aquí se consiguen en ciertos lugares, especialmente en Caracas donde existen algunos negocios con artículos importados de España; bueno, cuando logro comprar algunas, me doy un banquete, aunque por supuesto me falta el acompañamiento de los pimientos, de las aceitunillas jimenatas y de todas esas cosas ricas, pero me pongo tonta de mojar pan en éllas. Un día las preparé como si fueran una crema y las ofrecí como "pasapalo" (tapita para los traguitos), bueno aquello fué todo un éxito para los amigos, pues para éllos eso no es conocido. Y hablando de comida, debo "entrarle" a la cocina, a las l2 me llegan los comensales y todos vienen con un buen apetito. Hasta luego