La vida no siempre son trenes a los que hay que subir, a veces son estaciones en las que hay que bajar.

Las amistades se cuentan siempre dos veces: en las buenas, para ver cuántos son, y en las malas, para ver cuantos quedan.

Un verdadero amigo viene a tiempo, los demás cuando tienen tiempo.

Los amigos nunca se vuelve enemigos, si lo hacen, nunca fueron tus amigos.

Antonia buenas noches. que descanses. un abrazo.

Buenas noches hastamañana Sensi un abrazo.

Antonia buenas noches. que descanses. un abrazo.

¿CUESTIÓN DE LOCOS?

Durante la visita a un hospital psiquiátrico, uno de los visitantes preguntó al director:
- ¿Cuál es el criterio por el cual deciden quién necesita ser hospitalizado aquí?
El director respondió:
- Nosotros llenamos una bañera con agua y le ofrecemos al paciente una Cuchara, un Vaso y un Balde y le pedimos que la vacíe. De acuerdo con la forma en que él decida vaciarla, decidimos si lo hospitalizamos o no.
- ¡Ah! Ya entendí.
- Una persona normal usaría el balde, que es ... (ver texto completo)

Nadie es perfecto, por eso los lápices tienen goma.

Nunca dejes de aprender, porque la vida nunca deja de enseñar.

Cuando el trabajo es placer, ¡la vida es alegría!. Cuando el trabajo es un deber, la vida es esclavitud.

Y si la vida trae niebla, quédate al lado de los que sepan ser faro en
medio de la tormenta.

Buenos días foreros-as.. ¡Feliz viernes!

Buenas noches Antonia. que descanses. besillos.

Hola, todavía no he podido ver a la virgen de cuadros en la que mi madre siempre la recordaba mucho, yo soy el autor de la poesía que escribí en él año 2018 espero verla algún día, era en honor a mi madre catalina Ruiz Arévalo saludo a mi familia que vive hay

Buenas tardes:
Soy Ángel Concha Ruiz nieto de tu tío Fernando Ruiz Arévalo y de Isabel Bonillo Clemente. Si me facilitas una dirección de correo me gustaría escribirte, gracias.

“LA NIÑA QUE DABA ABRAZOS EN LA ESTACIÓN DE TREN”

Cada viernes por la tarde, la gente que salía del tren en la estación central de Sevilla se encontraba con la misma imagen:
Una niña de unos 10 años, con coletas desordenadas, un cartel hecho a mano… y los brazos abiertos.
El cartel decía:
“ ¿Tuviste un mal día? Yo regalo abrazos.”
Al principio, la gente pasaba de largo.
La miraban con desconfianza.
Pensaban que era parte de algún experimento social o un truco para pedir dinero.
Pero ella ... (ver texto completo)