Que poco quereis hacer la
juventud, que si la parada de autobús aquí o allí, que el que escribe tiene setenta años, hambre no pasé, pues todavia me dura, he andado leguas y leguas de terreno, de
carretera, de
noche y de dia, con frio, con cálor, aprendí a escribir con treita años, y espero morir de viejo, mis sueldos fueron siempre de miserias, mi sindicato obedecer como un animal para poder
comer algo, ¿que sabeis de la vida? de trabajar duro, de ser contestatario sin que valiera de nada, andar
... (ver texto completo)