Cuando el viento soplaba , la noche cubria con su manto mi cuerpo joven que se rendia en las calles de despues de un largo camino por montanas y carreteras , hatrto de pasar hambre y sin rumbo alguno, una noche de las muchas , me cubrio de nuevo en un rincon y el silencio me pacifico el hambre que tenia y en segundos cai en el sueno que me haria descansar para que al emprender un nuevo dia pudiera marchar sin que nadie me viera , temor era el mio de que me pudieran cojer como mendigo y llevarme a ... (ver texto completo)