** Estaba Cipriano en la sala de espera del
médico y de pronto ve a un niño que está llorando. Lleno de curiosidad se acerca a él y le pregunta:
- ¿Por qué lloras?
- Porque me van a hacer un análisis de sangre.
- Y ¿tienes miedo?
- Sí, porque mi hermano me dijo que te pinchan en la punta del dedo con una aguja.
Al oír Cipriano esto, se pone a llorar también y el otro le pregunta.
- ¿Tú también vienes a sacarte sangre o qué?
- No, vengo a hacerme un examen de orina?
