Se halla en la misma
plaza de la
Catedral y representa un fuerte contraste con la misma. Mientras aquella es todo barroquismo y gigantismo esta
iglesia es una pequeña
capilla que tuvo su origen en una
ermita. Nació como consecuencia de su ubicación junto a la entrada de las
murallas y en 1564 se convirtió en templo conventual de jesuitas. Pero en 1596 los ingleses atacaron
Cádiz y lo quemaron. Fue rehecho en 1635 por Alonso Romero en estilo maniarista. Tiene planta de
cruz latina con tres naves y
cúpula sobre pechinas.