Cuenta con dos
portadas de mármol de estilo manierista, una en su frente a la
plaza y la otra a la
calle de Santiago; y un sola
torre en
esquina realizada en dos cuerpos de altura, de planta octogonal el superior, acabada en una singular
cúpula con remate bulboso, obra del Siglo XVIII. En su interior conserva una serie de interesantes
retablos barrocos del Siglo XVII, siendo el más relevante el
Retablo Mayor, obra del maestro ensamblador Alejandro Saavedra, con dorado y policromado realizado por Juan Gómez Couto.