Andaría por ahí aprendiendo a pelear con armas de fuego, alá por Alcalá de Henares, naquela disciplina militar autoritarista, inda recuerdo andar kilómetros y kilómetros por aquellas montañas con el capazo a cuestas y aquel fusil o subfusil o la madre que lo parió, cuantos rapaces se caían, se mareaban o se les secaba a gorxa durante o recorrido, inda alguno le dije; esto no es nada comparado con a miña portela y aferramenta da miña aixada (claro que ellos no lo entendían, solo por el cambio del ... (ver texto completo)