Mensajes de ESGUEVILLAS DE ESGUEVA (Valladolid) enviados por Elias Martín:

Me agradaria contar con una foto nitida del retablo de la ermita de san vicente. Que se vean las imagenes que hay al lado del santo venerado en él, San Vicente, porque la necesito para un trabajo que estoy haciendo y no me es posinle desplazarme. La que se da en esta seccion me vale a medias. Gracias.
Pues si, también recuerdo a doña Juliana, maestra del pueblo, y a d. Ramiro medico común para los dos pueblos, y al cura d. Macaría y a los jóvenes con quienes competíamos a sacar a bailar a las mozas por Santa Ana, tiempos felices aquellos, a pesar de las carencias éramos muy jóvenes.
Saludos.
Conforme en casi todo, menos en lo del cura, que no se llamaba d. Macaría sino don Macario, supongo que será un lapsus. No sé si llegaste a conocer -perdón el tuteo- al maestro que vino despues, D. Isaí, para los niños, y su esposa Luci, para las niñas. Primero tuvinos una escuela mixta y ya con estos escuela unitaria, para que se vea que todo lo de hoy ya estuvo probado antes, fuera por necesidad o convencimiento. Seguiremos recordando.
Yo viví en Cubillas de Cerrato, pero con Población teníamos una relación muy próxima. Casto era uno de los amigos, Revilla se apellidaba. Los Moratinos, Ocasar, Vitoria etc, eran gente amistosa y amiga.
Casto era secretario del ayuntamiento, creo recordar. Y de los Ocasar soy yo. Precisamente mi padre, José, fue el que hizo el pozo que esta en la raya de Cubillas y PoblACION, COMO QUE EN EL PUEBLO LE LLAMABAN EL POCERO. Seguiremos dandole a los recuerdos.
Aquel pueblo que está cerca del rio Esgueva ¡Madre mía, hasta allí solíamos ir en bicicleta, que paliza nos dábamos subiendo la cuesta del Murallón desde Población de Cerrato ¡Llegábamos al páramo hechos unos zorros, sudados y deseosos de comenzar la bajada hacia Esguevillas; ¡que delicia la bajada, sin dar pedales.
Ay ¡Que poco duraba la alegría. Para volver había que desandar e camino, había que subir lo bajado y luego, mas tranquilos, bajar de nuevo lo subido. Eran tiempos felices de la adolescencia. ... (ver texto completo)
Enrique, no sé si eres de Población, aunque por lo que cuentas sí parece que tal cosa sea. Yo me llamo Elias y soy de Población y es verdad lo que dices, que ese paseo era un auténtico tobogán y por lo mismo, una gozada a par un suplicio. Tuve que hacer ese camino porque una hermana mía trabajó en casa de don Dionisio, que está, si mal no recuerdo, a las afueras del pueblo. Ya hace muchos años que no paso por allá y es posible que me confunda, aunque no creo.