OFERTA LUZ: 5 Cts/kWh

UJUE: La sagrada imagen de Nuestra Señora, que, como dijimos,...

La sagrada imagen de Nuestra Señora, que, como dijimos, apareció hacia
el siglo VIII, se conserva cuidadosamente en el altar mayor; es una efigie de
madera de 91 centímetros de alto; joya de inevaluable precio bajo el punto de
vista religioso, y valiosísima también para el arqueólogo, pues presenta los
caracteres del arte cristiano de la época de los visigodos, lo cual viene en apoyo de la tradición, por ser indudablemente tan notable imagen de aquellas que
hubo que ocultar en los luctuosos tiempos de la invasión agarena.
La Virgen de Usúa está sentada y tiene el Niño-Dios en su regazo. Una y otra figura están revestidas de chapas de plata a excepción de las manos y los
rostros; pero esa vestidura metálica es, según entendemos, muy posterior a la
escultura de madera, que es la primitiva.
La silla en que se halla sentada, chapeada también de plata, ostenta seis
escudos con las armas reales de Navarra posteriores a los Teobaldos; son de
cada uno de los costados y dos al frente. En el centro de los laterales, se vé
una imagen de Nuestra Señora y esta inscripción: Sigillum Beatoe Mariæ de
Rocamador.
Los del frente tienen, asimismo, dos medallones con la figura del Salvador
bendiciendo.
¿Cómo explicar esa inscripción en aquel sitio? ¿Son esos medallones, o esa
silla, donativo del vetustísimo santuario de la Virgen de Rocamador, vecino a
Estella?
La sagrada efigie que desde hace mil años se guarda en Ujué, subsiste en
buen estado de conservación. y la polilla que carcomió la peana la ha respetado
por completo.
Objeto de férvido entusiasmo en el país, la Madre de los afligidos parece
velar, desde el excelso monte, sobre una gran parte de esa tierra Navarra que,
a través de los siglos, sigue depositando a sus plantas el homenaje de sus oraciones y sus lágrimas.