Basílica de Ujué
Las obras de reforma de la iglesia Santa María de Ujué comenzaron el 15 de noviembre de 2001 con una primera fase que consistió en la colocación de los andamios y la elaboración de un informe de datos sobre la galería gótica y la torre de campanas. Pero fue el 16 de octubre de 2002 cuando comenzaron las mejoras propiamente dichas en ambas zonas de la iglesia.
Estas obras supusieron, fundamentalmente, una limpieza de la galería gótica, mientras que también se procedió a consolidar y restaurar su estructura de madera. En cuanto a la torre de campanas, se han sustituido los forjados de vigas de madera por losas de hormigón unidas por una escalera de caracol. De esta manera se pretende un mejor uso de las citadas escaleras que permita un acceso más cómodo y seguro a la planta almenada de la torre.
La rehabilitación de estas zonas de la iglesia concluyó a principios de este año, con un coste cercano a los 420.000 euros, una cantidad inferior al presupuesto inicial, según indicó el presidente del Gobierno de Navarra. Miguel Sanz añadió que el objetivo prioritario de la reforma es recuperar la torre como atalaya con el fín de revitalizar el uso del patrimonio histórico. Sin embargo, no se pueden dar por concluidas las reformas, ya que otras zonas del templo también necesitan un lavado de cara que tiene previsto acometer la Fundación para la Conservación del Patrimonio Histórico. Dichas obras continuarán hasta el 2005.
Las obras de reforma de la iglesia Santa María de Ujué comenzaron el 15 de noviembre de 2001 con una primera fase que consistió en la colocación de los andamios y la elaboración de un informe de datos sobre la galería gótica y la torre de campanas. Pero fue el 16 de octubre de 2002 cuando comenzaron las mejoras propiamente dichas en ambas zonas de la iglesia.
Estas obras supusieron, fundamentalmente, una limpieza de la galería gótica, mientras que también se procedió a consolidar y restaurar su estructura de madera. En cuanto a la torre de campanas, se han sustituido los forjados de vigas de madera por losas de hormigón unidas por una escalera de caracol. De esta manera se pretende un mejor uso de las citadas escaleras que permita un acceso más cómodo y seguro a la planta almenada de la torre.
La rehabilitación de estas zonas de la iglesia concluyó a principios de este año, con un coste cercano a los 420.000 euros, una cantidad inferior al presupuesto inicial, según indicó el presidente del Gobierno de Navarra. Miguel Sanz añadió que el objetivo prioritario de la reforma es recuperar la torre como atalaya con el fín de revitalizar el uso del patrimonio histórico. Sin embargo, no se pueden dar por concluidas las reformas, ya que otras zonas del templo también necesitan un lavado de cara que tiene previsto acometer la Fundación para la Conservación del Patrimonio Histórico. Dichas obras continuarán hasta el 2005.
