San Pedro es la
iglesia más antigua conservada en
Olite. Es un templo
románico tardío de tres naves con reformas de época barroca que eliminaron la cabecera
románica de tres
ábsides.
El interior muestra las naves separadas por pilares cruciformes y parejas de
columnas adosadas -al estilo hispanolanguedociano- que soportan
bóvedas de crucería. Todo denota un periodo evolucionado del románico ojival apegado a los cánones de las
iglesias cistercienses (resulta obvia la similitud con la iglesia del cercano
monasterio de La Oliva), extremo que queda patente en la sencillez vegetal que muestran los
capiteles de las columnas.
Las partes más importantes son la preciosa
portada occidental y el
claustro, ambos también de un románico muy evolucionado.
La portada occidental
La
puerta tiene cinco amplias y abocinadas arquivoltas de medio punto que cobijan un tímpano escupido de formas prácticamente góticas.
Por encima hay un gran
rosetón bajo
arco agudo.
Además hay que señalar la gran
torre gótica de 54 metros de altura, rematada con un bonito y curioso chapitel agudo.
Del claustro se conservan tres pandas con
arcos de medio punto apoyados sobre columnas dobles y capiteles de hojarasca y cabecitas góticas.