ENTRE LAS RIAS GALLEGAS.
Vienen brisas tempraneras
queriendo hallar claridades,
con bondades mañaneras
que sueñan eternidades.
Estas rías que derrochan
canciones de este lugar,
donde las lluvias abrochan
las nubes que han de llegar.
Corren los vientos deprisa
con sus pausas altaneras,
mientras el calor se eclipsa
en rutas aventureras.
Rías que tienen presentes
para muchas marisqueras,
donde se viven ambientes
con sus brisas marineras.
Galicia tiene sus nubes
que van dejando llovizna,
muchas veces lo descubres
cuando conoces su clima.
Eucaliptos aflorando
que nunca temen al viento,
el paisaje va brillando
sin pensar en sufrimiento.
Gallegos de lluvia y calma
nos habló Miguel Hernández,
con un depende en el alma
que anula sus soledades.
Hoy pensando en Rosalía
la poetisa más gallega,
que conoció la alegría
y su verso hoy se despliega.
G X Cantalapiedra.
Vienen brisas tempraneras
queriendo hallar claridades,
con bondades mañaneras
que sueñan eternidades.
Estas rías que derrochan
canciones de este lugar,
donde las lluvias abrochan
las nubes que han de llegar.
Corren los vientos deprisa
con sus pausas altaneras,
mientras el calor se eclipsa
en rutas aventureras.
Rías que tienen presentes
para muchas marisqueras,
donde se viven ambientes
con sus brisas marineras.
Galicia tiene sus nubes
que van dejando llovizna,
muchas veces lo descubres
cuando conoces su clima.
Eucaliptos aflorando
que nunca temen al viento,
el paisaje va brillando
sin pensar en sufrimiento.
Gallegos de lluvia y calma
nos habló Miguel Hernández,
con un depende en el alma
que anula sus soledades.
Hoy pensando en Rosalía
la poetisa más gallega,
que conoció la alegría
y su verso hoy se despliega.
G X Cantalapiedra.