HISTORIA. Ya dijimos en su art., que comunmente se reduce a esta v. la ant. c. Iría-Flavia, célebre en los faustos ecl. Algunos, y entre otros el erudito D. Gregorio Mayans (escrito con error de imprenta en el citado art. Mayaris, donde se ha tomado la n por ri), interpretan aquel nombre población o ciudad. Con un origen desconocido era de los ant. Caporos, que constituían una de las diferentes parcialidades caláicas en la España primitiva. Es notable entre las lápidas de la ant. España, una encontrada en el Padrón con la inscripción siguiente:
NETACI
VEILFERIC. E
SÜLPICIUS. SEVERUS
V. S. L. M.
Iría tomó el apellido Flavio, sin duda en honor de Flavio Vespasiano. Fue adscrita al conv. jurid. de Lugo. Fue mansión militar del Itinerario Romano. Floreció en la monarquía hispano-goda, y fue elevada a la jerarquía de c. episcopal. Hay muchas memorias de los ob. irienses en los concilios. Hay quien ha creído que los discípulos de Santiago después que este apóstol hubo padecido el martirio en Jerusalén, lo encerraron en una barca, que confiaron a las olas del mar de Siria, y que vino a parar a esta c. No refutaremos este piadoso ensueño, porque difícil es pueda haber ya quien lo padezca. Alfonso el Casto restauró el obispado de Iría-Flavia en Santiago de Compostela (V.). El escudo de armas de esta v. ostenta una barca con el cuerpo del Apóstol, atado a un pilar o mástil, un discípulo en su proa y otro en la popa: en medio una cruz y encima una estrella con 3 veneras o conchas de peregrino.
* Diccionario Geográfico – Estadístico - Histórico de España. Pascual Madoz, 1848.
NETACI
VEILFERIC. E
SÜLPICIUS. SEVERUS
V. S. L. M.
Iría tomó el apellido Flavio, sin duda en honor de Flavio Vespasiano. Fue adscrita al conv. jurid. de Lugo. Fue mansión militar del Itinerario Romano. Floreció en la monarquía hispano-goda, y fue elevada a la jerarquía de c. episcopal. Hay muchas memorias de los ob. irienses en los concilios. Hay quien ha creído que los discípulos de Santiago después que este apóstol hubo padecido el martirio en Jerusalén, lo encerraron en una barca, que confiaron a las olas del mar de Siria, y que vino a parar a esta c. No refutaremos este piadoso ensueño, porque difícil es pueda haber ya quien lo padezca. Alfonso el Casto restauró el obispado de Iría-Flavia en Santiago de Compostela (V.). El escudo de armas de esta v. ostenta una barca con el cuerpo del Apóstol, atado a un pilar o mástil, un discípulo en su proa y otro en la popa: en medio una cruz y encima una estrella con 3 veneras o conchas de peregrino.
* Diccionario Geográfico – Estadístico - Histórico de España. Pascual Madoz, 1848.