Dicen que, antes de mi luz, ella fue hermosa. He de reconocer que, cuando conocí a la maestra, la beldad de mi madre era cierta; siendo muy alegre, sin embargo, estaba poseída por la tristeza. Posiblemente, tuvo más pesadillas que sueños, y tuvo cinco. Tenía mi madre la faz según el tiempo; al alba, lo más de limón; al estío, como arruga de café. Luchó contra el alba por levantarse primero y sólo la noche de pudo. Vivió entre cuchillos hasta que uno- incorpóreo e intangible homicida- la hirió de muerte. Vinieron los caballos negros a pisar su dulzura con herraduras de plata y, al final, pisotearon sus pechos con las de acero; y, no le importó que le dejaran los indelebles moratones, acompasándose con ese grito silencioso que se desgarra en el tiempo. Creo que mi madre, añoraba la nostalgia del olvido, grabando a fuego los recuerdos. Yo, en los tiempos en que el niño del mar llamaba a las puertas del cielo, siempre me preguntaba, junto a las procelosas tormentas del silencio: ¿Qué tendrá mi madre? ¿Una arruga indefinida? ¡No, son cosas de niños! Al final, fenecen los infiernos al socaire del dios de la nada y los estigmas confluyen es una humilde losa. Recuerdo, sin embargo, que aquél mayo se quedó sin agua. PC
Fco. Javier, tú no me recordarás porque eres más joven que yo y cuando me marché del pueblo eras bastante pequeño.; yo sí recuerdo a tus padres y a un chavalín rubio que eres tú.
He leído tu comentario de la foto de la boda y te noto un gran amor por tu madre, que ya no está, una nostalgia muy unida a la tristeza que todos los buenos hijos sienten por sus buenas madres; pero tu tristeza es tan grande, que me parece AMARGURA. F. J. no quiero verte así, permíteme hacerte esta pequeña reflexión:
Si tú la amas, es porque ella te amó a tí ANTES. A tí y a los demás.
Dices que tuvo más tristezas que alegrías. Yo no lo creo: las personas que AMAN (como ella) tienen la FELICIDAD más grande que se puede tener en este mundo. Por experiencia, (y todo el que se para a pensarlo está de acuerdo), sé que uno no "flota"en felicidad cuando ES AMADO, sino CUANDO AMA. Por eso creo que los cinco sueños la colmaron, no hay en esta mundo un amor más puro que el de una buena madre. Quizás las tristezas a que te refieres hayan sido enfermedades, depresión, contrariedades que todos tenemos... TODOS tenemos alegrías y tritezass. Yo, sin conocerla, te aseguro que con ese amor que tuvo CONOCIÖ LA FELICIDAD INTENSAMENTE.
No sé si me habré explicado bien, lee mi mensaje despacio, medita cada frase.Échala de menos, siente "morriña" (como decimos en Galicia), pero no dejes que te DOMINE la amargura. A ella, desde donde esté, no le gustaría. ¡Venga!
Y si con mis palabras no he conseguido mi objetivo, no me lo tomes a mal. Te he visto muy triste y no lo he podido evitar (hablarte de esto).
Un saludo afectuoso.
He leído tu comentario de la foto de la boda y te noto un gran amor por tu madre, que ya no está, una nostalgia muy unida a la tristeza que todos los buenos hijos sienten por sus buenas madres; pero tu tristeza es tan grande, que me parece AMARGURA. F. J. no quiero verte así, permíteme hacerte esta pequeña reflexión:
Si tú la amas, es porque ella te amó a tí ANTES. A tí y a los demás.
Dices que tuvo más tristezas que alegrías. Yo no lo creo: las personas que AMAN (como ella) tienen la FELICIDAD más grande que se puede tener en este mundo. Por experiencia, (y todo el que se para a pensarlo está de acuerdo), sé que uno no "flota"en felicidad cuando ES AMADO, sino CUANDO AMA. Por eso creo que los cinco sueños la colmaron, no hay en esta mundo un amor más puro que el de una buena madre. Quizás las tristezas a que te refieres hayan sido enfermedades, depresión, contrariedades que todos tenemos... TODOS tenemos alegrías y tritezass. Yo, sin conocerla, te aseguro que con ese amor que tuvo CONOCIÖ LA FELICIDAD INTENSAMENTE.
No sé si me habré explicado bien, lee mi mensaje despacio, medita cada frase.Échala de menos, siente "morriña" (como decimos en Galicia), pero no dejes que te DOMINE la amargura. A ella, desde donde esté, no le gustaría. ¡Venga!
Y si con mis palabras no he conseguido mi objetivo, no me lo tomes a mal. Te he visto muy triste y no lo he podido evitar (hablarte de esto).
Un saludo afectuoso.