Mi querido primo F. C. antes que nada te diré que gracias Dios aunque uno sea algo viejillo (tu no andas muy lejos) mi casa (la cual por cierto no se si has visitado en alguna ocasión) es bastante moderna, no tiene televisor en blanco y negro, lo tiene con pantalla panoramica, (42" nada más) y alta definición, por lo tanto veo las cosas de maravillas (aún no necesito gafas, estoy hecho un chaval) y asíluego comento lo que sucede a mi entender que tampoco es ley, reconozco la superioridad del Barsa
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Querido primo: unas puntualizaciones. La ironía es fundamental para manejarnos por los verigüetos de la escritura. De tal manera hay que tomarse las cosas futboleras. Es una obviedad, que la TV a la que me refiero, no es física; más bien mental. Es decir, la TV que tu generas en tu mente, las cosas que tu quieres ver. Es una obviedad por otra parte que, cuando hablo de “adláteres”, me estoy refiriendo a tus correligionarios- a los que veis las cosas blancas- sin otro posible significado. No es menos obvio que no recuerdo a ningún central del Barcelona que se llamara Goicoechea (debió de ser el del Bilbao, que se “cargó” a Maradona) Es obvio, me acuerdo, que un defensa del Granada- no recuerdo su nombre- mandó a un tal Amancio al hospital- no recuerdo los meses- y que, de paso, el tal defensa, dejó de ejercer su profesión en España. En ningún momento- Dios me libre- he dicho, y aquí la obviedad raya lo esperpéntico, que tú pretendas darnos clases de españolidad. ¡NO HE DICHO ESO! He escrito, literalmente: “como VE., y mi querido primo Antídoto50, comprenderá, no nos van a dar clases de españolidad, cuatro individuos sentados en un palco…” Me refiero, a los que pretenden darnos clases a ti, al Excmo. Sr. REALITO, y a mí, de ciertas cosas, mientras se fuman cuatro puros sentados amablemente en un palco. Simplemente era eso, nada más. Como tú comprenderás, no se me pasaría por la mente decir otra cosa. Y es una obviedad al cuadrado que, como dijera Campoamor: “En este mundo traidor, nada es verdad ni mentira; todo depende del color del cristal con que se mira”. Por lo tanto, esto, de ser seguir así, se convertiría en un “diálogo de besugos” discutiendo sobre el imperio bizantino. Se os quiere. PC
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