¿Huye de los líos?
Aunque se empeñe el presidente en negar la mayor, lo cierto es que él -según la mayoría de las encuestas- sigue siendo, una y otra vez, el presidente del Gobierno peor valorado. Le pierden, como persona, muchas cosas. Su lejanía de la realidad ciudadana y, sobre todo, de la gente de a pie es más que evidente. Afirma que él huye de los líos, pero continúa, no obstante, atrapado por el inmenso y descarado lío de la corrupción, no controlada por él. Su deber era erradicar a los chorizos y conducirles a la Justicia. Y no ha hecho don Mariano más que mirar hacia otro lado.
El rey Rajoy está desnudo
Pedro Sánchez lo ha dejado desplumado. El rey Rajoy está desnudo. Y todo el mundo en general, incluidos no pocos de militantes del PP, lo tienen asumido como el presidente que pasará a la historia por la puerta de atrás. Su equipo de ministros y altos cargos es infumable. Hemos visto que, además, es un político mal educado. Se creyó que Sánchez era un saltimbanqui de la ignorancia y le salió tiro por la culata. Se permitió, este mentiroso imparable, impedirle la entrada en el Congreso de los Diputados como si él fuera su dueño.
La vuelta a la tortilla
El secretario general del PSOE ha conseguido darle la vuelta a la tortilla. Hizo lo que tenía que hacer. El Gran Tramposo no podrá seguir con sus falacias para idiotas a su medida. El cambio que exige la mayoría de los ciudadanos podrá ser finalmente viable. Conviene recordar que el PSOE fue el cambio protagonizado por Felipe González y sus colaboradores. Muchos años más tarde el cambio vuelve. El protagonista puede ser Pedro Sánchez. Y, por supuesto, el pueblo soberano.
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